El Ministerio de Recursos Humanos y Emiratización de Emiratos Árabes Unidos (MoHRE) ha remitido a una empresa privada a la Fiscalía Pública por deducir dinero del apoyo financiero asignado como parte de un programa federal para becarios emiratíes.
Una becaria emiratí en la empresa interpuso la denuncia al descubrir que la compañía había dado instrucciones a los becarioss para que pagaran una contribución económica mensual, que se dedujo de su apoyo financiero recibido durante el proceso de formación de más de 12 meses como parte del programa 'Nafis'. La empresa alegó que destinaba las cantidades deducidas a iniciativas humanitarias.
“Tales prácticas se consideran una violación de los requisitos explicados a los establecimientos antes de que Nafis les otorgue la licencia para capacitar a los emiratíes”, detalló el Mnisterio en un comunicado el jueves. “Tales prácticas también se consideran una desviación del objetivo básico del proceso de capacitación, que es equipar a los emiratíes en el sector privado y desarrollar sus habilidades antes de que sean empleados de forma permanente por esos establecimientos después de completar con éxito la capacitación”.
El MoHRE enfatizó que "tratará con firmeza las infracciones mediante la imposición de sanciones administrativas y multas contra los establecimientos que intenten explotar los incentivos y beneficios de Nafis".
Nafis ofrece múltiples beneficios a los emiratíes, incluido el apoyo salarial, la asignación por hijos y los beneficios por desempleo. Un apoyo de formación en el trabajo tiene como objetivo subir los sueldos de los emiratíes que deseen participar en programas de formación práctica en el sector privado.
A principios de esta semana, el Ministerio manifestó que comenzó a implementar multas para las empresas que falsifican datos de emiratización. Si un establecimiento lleva a cabo una emiratización falsa para obtener beneficios del programa Nafis, se impone una multa de entre 20.000 y 100.000 dirhams por cada empleado emiratí falso.
Las empresas de EAU con 50 o más empleados tienen la obligación de aumentar anualmente su tasa de emiratización en un dos por ciento de los puestos de trabajo calificados en general. A partir de enero de 2023, se impondrá una multa mensual de 6.000 dirhams por cada emiratí que no haya sido contratado.
