El enviado especial de la ONU para Yemen, Ismail Uld Sheij Ahmed, declaró este viernes que ya está preparando las negociaciones de paz en el país, aunque advirtió que las posturas de las partes están aún muy alejadas, según publica la agencia de noticias EFE.
"Espero que este primer diálogo cara a cara marque un camino para acabar rápidamente con la lucha, volver al diálogo político y que Yemen retorne a una transición política ordenada y pacífica", dijo Ahmed al Consejo de Seguridad.
El diplomático confirmó que tiene el compromiso para participar en ese proceso tanto de una delegación del presidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi, así como de representantes de los rebeldes hutíes y de su principal apoyo, el partido del expresidente Ali Abdalá Saleh.
El enviado de la ONU avisó, en todo caso, de que las posturas continúan muy lejanas y pidió a la comunidad internacional todo el apoyo al proceso. "Esta primera señal de esperanza tendrá que ser alimentada y protegida", aseguró.
Ahmed recordó además la "catastrófica situación" humanitaria en la que el conflicto ha situado a Yemen, donde según Naciones Unidas millones sufren por la falta de alimentos y otros productos básicos.
"El país está sangrando y sus ciudades en colapso. Los ciudadanos de Yemen se ven privados de los derechos más básicos y atrapados en medio de una disputa política y una guerra sin control", dijo el enviado especial. Hasta ahora, los esfuerzos que la ONU mantiene desde hace meses para lograr una solución diplomática al conflicto no habían tenido éxito.
Las fuerzas progubernamentales, con el apoyo de la coalición árabe liderada por Arabia Saudí, han logrado, desde este verano, recuperar el control de grandes áreas del sur del país que estaban en manos de los rebeldes hutíes.
Unas 5.000 personas han fallecido en la guerra civil, según organizaciones humanitarias y datos de Naciones Unidas, que ha denunciado que la coalición es responsable de dos tercios de los civiles muertos en el país.
