jueves. 28.03.2024

Acompañado por Cien años de Soledad

"En diferentes partes del mundo se hacen homenajes y recuerdos de aquella novela que sigue invitando a los lectores a viajar a ese mundo llamado Macondo"
Inauguración de plaza García Márquez en París.

“Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo.”

Gabriel García Márquez (Cien años de Soledad).

Como todos saben – o deberían saberlo- el gran clásico contemporáneo de la literatura en lengua española 'Cien Años de Soledad', cumple cincuenta años de su primera edición, por la editorial Sudamericana de Buenos Aires. Gracias al aniversario, aparecen nuevos comentarios sobre la novela y su autor, un colombiano universal llamado Gabriel García Márquez.

Cien años de soledadSe leen análisis y anécdotas sobre la obra y el escritor, no falta el que desea llamar la atención, como quien decía que la mencionada novela ya no tenía vigencia, lo que equivale a decir que los seres humanos ya no nos identificamos con Homero, Leonardo Da Vinci, Cervantes, Orson Welles, porque pasaron de moda. Alguna clase sobre clásicos universales se perdió ese mediático escritor, de cuyo nombre no quiero acordarme.

Por mi trabajo diplomático, debo desplazarme por diversos sitios, hace poco fui invitado a un homenaje que en Minneapolis una organización sin ánimo de lucro llamada Global Minnesota, realizó en honor de Colombia, por considerarlo el país destacado durante el último año. Antes de viajar, se me ocurrió pasar por una librería para comprar unos ejemplares de 'Cien Años de Soledad' en inglés, que encontré en una conocida compañía de venta de libros. Mi objetivo era regalárselos a los directivos de la asociación, como muestra de afecto y agradecimiento por tener ese bonito gesto con Colombia.

Para mi sorpresa, al término de una cena en donde hubo discursos elogiosos sobre mi país, a quienes estuvimos allí, nos obsequiaron un paquete que al abrirlo, contenía un ejemplar de 'Cien Años de Soledad' y una muestra de café colombiano. Afortunadamente, mi esposa Patricia, que es mucho más previsiva, llevaba unas artesanías que pudimos entregar a los organizadores al día siguiente. Así que al final quedé con más libros de los que llevaba inicialmente, pero la coincidencia no terminó ahí. En el vuelo de regreso, un joven que se sentó a nuestro lado, iba muy concentrado leyendo la misma novela publicada en 1967. Eso me lleva a pensar, que el realismo mágico no solo ocurre en Colombia.

Una plaza de París acaba de ser bautizada con el nombre completo de quien en vida muchos conocieron como Gabo -en la imagen superior- y en diferentes partes del mundo se hacen homenajes y recuerdos de aquella novela que sigue invitando a los lectores a viajar a ese mundo llamado Macondo, para conocer la historia de una familia de apellido Buendía y gitanos inventores como un tal Melquíades, mientras las mariposas amarillas revolotean alrededor de su creador. Al tiempo que las estirpes condenadas a cien años de soledad, buscan una segunda oportunidad en la Tierra, así sea en la literatura.

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Dixon Moya es diplomático colombiano de carrera, escritor por vocación, lleva un blog en el periódico colombiano El Espectador con sus apellidos literarios, en el cual escribe de todo un poco: http://blogs.elespectador.com/lineas-de-arena/ En Twitter a ratos trina como @dixonmedellin 

Acompañado por Cien años de Soledad
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