Una mona solitaria en un zoológico israelí ha encontrado una manera de calmar sus impulsos maternos: adoptando un pollo.
Niv, una hembra macaco negra indonesia, se ha pasado la semana pasada acariciando, limpiando y jugando con el ave en el Ramat Gan Safari Park, cerca de Tel Aviv.
"Parece que Niv, que tiene cuatro años ha alcanzado la edad de madurez sexual y tiene dificultades para encontrar un compañero, esto probablemente explica el instinto maternal que ella expresa a este pollo", dijo la portavoz del zoológico Mor Porat, según publica el diario Saudi Gazette.
El ave, que no tiene un nombre, podría escapar fácilmente a través de las barras de la jaula pero elige permanecer cerca de Niv.
"Este tipo de relaciones son raras", dijo Porat. "A veces los macacos matan y comen pollos que entran en sus corrales o juegan con ellos hasta que mueren".
Para evitar un final tan trágico, Los funcionarios separaron a Niv y su compañero emplumado de los otros macacos.
Porat añadió que el pollo "parece muy feliz de haber encontrado una madre de alquiler, y por la noche duermen juntos". Hace unos meses, Niv intentó adoptar otro pollo, pero éste rechazó sus avances.
Al parecer, las amistades de distintas razas entre animales son improbables y a menudo el resultado de afinidad se debe a que las diferentes especies son agrupadas por seres humanos. Un oso, un león y un tigre descubiertos durante una incursión en Estados Unidos permanecieron inseparables de por vida después de que fueron trasladados a un santuario animal.
