jueves. 25.04.2024

Cristal templado, paneles de aluminio pulido, emulsión al agua, poliuretano líquido con diferentes brillos, confeti plateado, robots aspiradores, audio ASMR, difusores de aire rociando esencia perfumada de champán. Lo que acaban de leer es un fragmento de la presentación del dúo de artistas turcos Mental Klinik, cuya obra se expone en Madrid hasta el 26 de marzo. El texto añade algo más: “Hypermoody presenta obras que desafían la definición de pintura”. Es evidente. Pero no únicamente. También desafían los clichés sobre el arte contemporáneo que se produce en el Mediterráneo sur y Oriente Medio.

Mental Klinik no es una marca creativa árabe. Pero pertenece a la pujante eclosión pictórica de Oriente Medio. Y es la última de las propuestas artísticas de la madrileña galería Sabrina Amrani, que acaba de cumplir diez años. La sala de arte abrió sus puertas en 2011 para llenar un vacío oceánico. Hasta entonces, el arte contemporáneo que se realiza en el Magreb y Oriente Medio era obstinadamente ignorado en los circuitos convencionales de España. Sabrina Amrani y Jal Hamad se propusieron quebrar esa dinámica para dar visibilidad a la creación emergente en lo que denominan sur global. A lo lardo de una década, más de un centenar de artistas han colgado sus obras en una galería que presta especial atención al mundo árabe.

Exposición 'Un mundo de retales'. (Cedida)
Exposición 'Un mundo de retales'. (Cedida)

Sabrina Amrani es francesa de origen argelino. Jal Hamad es español de padre sirio. Ninguno de los dos tenía una vinculación profesional con el mundo artístico, más allá de una íntima pasión personal. “Tenía sentido trabajar con artistas de Oriente Medio y el norte de África”, asegura Hamad por teléfono desde Madrid. La exposición inaugural fue a cargo de Zoulikha Bouabdellah, una artista argelina afincada en Casablanca. Después han ido desfilando creadores de Marruecos, Arabia Saudí, Palestina, Emiratos y un buen número de países de cultura islámica.

“Nuestra idea era promocionar a artistas con poca visibilidad en Europa y para nosotros era importante darles una oportunidad y una plataforma para su voz. Hasta entonces había poca representación de artistas de esa zona”, recalca Hamad. Aparte del centenar de exposiciones que han acogido en Madrid, la galería Sabrina Amrani ha desplegado una intensa actividad foránea con participaciones en ferias de arte de todo el mundo, desde Hong Kong a Nueva York, pasando por Ciudad del Cabo, Düsseldorf o Abu Dhabi. Han sido particularmente activos con los países del Golfo, donde la inversión museística experimenta un crecimiento exponencial. Baste recordar la apertura del Louvre Abu Dhabi, el Museo del Futuro en Dubai o el Guggenheim que se planea construir en la capital de Emiratos para 2025. “Es un momento de expansión brutal. Solo en Arabia Saudí se están construyendo 30 museos actualmente”, recalca.

Jal Hamad: “El arte árabe está ahora pujante en el mundo. Acabo de volver de la Feria de Dubai y era alucinante”

“El arte árabe está ahora pujante en el mundo. Acabo de volver de la Feria de Dubai y era alucinante”, afirma Jal Hamad. En su opinión, el momento creativo de los artistas del Mediterráneo sur y Oriente Medio es excelente. “El arte contemporáneo y moderno árabe están funcionando muy bien. Es una de las tendencias que hay desde hace ya algún tiempo”. El camino hasta llegar aquí no ha sido fácil. Hasta ahora los circuitos artísticos españoles han vivido de espaldas a los creadores que vienen del sur. “Al principio, muchos colegas no entendían muy bien a qué nos dedicábamos, pero con el tiempo la audiencia ha mejorado”, explica el copropietario de la sala Sabrina Amrani.  “Vivimos en un mundo global y cuantas más voces se escuchen de distintos sitios del mundo más creceremos intelectualmente”. España ha ido abriendo paulatinamente las puertas a la producción artística que se forja más allá del Estrecho de Gibraltar y “ahora tenemos más tráfico que nunca”, proclama Jal Hamad.

La mayoría de los artistas del Magreb y Oriente Medio que han expuesto en Sabrina Amrani no viven en España. Yasemin Baydar y Birol Demir, integrantes del dúo Mental Klinik, están afincados en Bruselas. Y es frecuente que muchos otros elijan terceros países para establecer su residencia. “Imagine en Siria para encontrar un espacio donde trabajar o materiales con los que pintar”, plantea el copropietario de la galería. “En esa región hay muchos países castigados y la gente intenta escapar hacia donde es más sencillo vivir. En Europa se vive mejor y con más libertades, además de tener más facilidad para trabajar”.

El arte contemporáneo árabe abarca numerosos estilos, tal como queda a la vista en la Galería de Sabrina Amrani. (Cedida)
El arte contemporáneo árabe abarca numerosos estilos, tal como queda a la vista en la Galería de Sabrina Amrani. (Cedida)

Es el caso de Asmaa Al Issa y Cristine Gedeon, dos de las cuatro artistas que participan en la muestra ‘Un mundo de retales’, organizada por Casa Árabe y comisariada por María Gómez. Las dos abandonaron sus países de origen, Irak y Siria, para establecerse en Canadá y Berlín. Junto a la artista marroquí Amina Agueznay y la saudí Filwa Naser, las cuatro creadoras trenzan una narrativa propia a través de materiales textiles. Lo explica la historiadora del arte María Gómez: “El textil evoca esa idea del proceso y el mundo está constantemente entretejido de intercambios entre personas, espacio y tiempo”.

María Gómez es especialista en arte árabe contemporáneo. Y es consciente de la ausencia de estudios académicos en España que investiguen la creación artística que se cuece al sur de Europa. “Falta desarrollar estudios más profundos sobre lo que pasa actualmente en el mundo árabe. Yo tuve que hacer un máster en Londres porque aquí en España no había ningún sitio”, asegura en conversación telefónica con El Correo del Golfo. “Aquí no sabemos lo que se cuece en el arte árabe. Hay un gran desconocimiento que se va paliando poco a poco. Y cada vez hay más curiosidad”.

María Gomez: "El arte contemporáneo es una manera de buscar otros puntos de vista y entender que el mundo árabe son muchos mundos"

El clima está cambiando en los últimos años. Cada vez hay más interés en conocer la producción artística árabe y las voces creativas se multiplican. “El arte contemporáneo es una manera alternativa y más íntima de aproximarse a vivencias cotidianas de lo que aquí conocemos como mundo árabe. Y es especialmente interesante sobre una región cubierta de tantos estereotipos”, lamenta María Gómez. “Es una manera de buscar otros puntos de vista”, agrega la experta, “y entender que el mundo árabe son muchos mundos”.

Ahí está una de las claves. Comprender la enorme diversidad de un universo múltiple y complejo como el mundo árabe. En España las cosas empiezan a moverse. Ya puso el primer peldaño la galería Sabrina Amrani. Pero no es la única. En Barcelona, la sala ADN también ha puesto su foco en la producción artística más allá del Mediterráneo. Y fuera de las dos grandes metrópolis, otras galerías de Sevilla, Valencia, León o Galicia empiezan a programar artistas de procedencia árabe. “En España cada vez se mueve más el arte contemporáneo árabe”, admite María Gómez. Y no únicamente en las galerías privadas. También en reputados centros públicos de enorme difusión. Por ejemplo, el Museo Guggenheim expone hasta el 12 de junio la obra de la artista kuwaití nacida en Senegal Monira Al Qadiri. O la ‘Trilogía Marroquí’ presentada por el Museo Nacional Reina Sofía el pasado año. O también el programa sobre el arte egipcio organizado en 2017 en este mismo centro bajo el epígrafe: ‘Art et Liberté. Ruptura, guerra y surrealismo en Egipto (1938-1948)’.

La muestra 'Un mundo de retales' está cargada de simbología árabe. (Cedida)
La muestra 'Un mundo de retales' está cargada de simbología árabe. (Cedida)

Casa Árabe juega un papel decisivo en la divulgación del arte contemporáneo. Desde su fundación en 2006, mantiene un programa estable de difusión cultural sobre la producción artística procedente del Magreb y Oriente Medio. “Canaliza un programa muy completo y actualizado”, subraya María Gómez. “Y utiliza el arte y la cultura como medios para dar a conocer qué ocurre en el mundo árabe”.

De hecho, en 2019 la revista Awraq, que edita Casa Árabe, dedicó un monográfico al arte árabe contemporáneo. A lo largo de 184 páginas, una decena de especialistas desgranaron el momento actual de la creación artística que se produce al sur del Mediterráneo. El volumen incluía una sugerente introducción firmada por Nuria Medina, responsable del área de cultura de Casa Árabe, donde abordaba el panorama general del arte contemporáneo y lanzaba algunos interrogantes sobre los “estereotipos y distorsiones hacia las culturas del mundo árabe”.

En todo caso, constituye una realidad incontestable que el arte árabe de hoy está rompiendo fronteras en todo el mundo, gracias a la creciente movilidad planetaria y al fenómeno imparable de la globalización. Y España, desde luego, no podía ser una excepción.

El arte árabe contemporáneo rompe fronteras
Comentarios