Cincuenta días antes de que comience la Copa del Mundo de Fútbol en Qatar, los trabajadores aún vierten cemento y martillean durante la noche para preparar hoteles de lujo y apartamentos para un millón o más de fanáticos del fútbol.
Cientos de inmigrantes ultiman las obras dentro de las Torres Katara de 211 metros (696 pies) de altura, donde los invitados VIP del organismo rector del fútbol mundial, la FIFA, se hospedarán durante el torneo. Los seguidores pagarán miles de dólares la noche por las habitaciones con sótanos de mármol y un vestíbulo con uno de los candelabros más grandes del mundo. Sin embargo, montañas de arena se asientan en los escalones y algunas de las ventanas de vidrio ahumado aún no se han instalado en este punto de referencia en el paseo marítimo de Lusail, cerca del estadio que albergará la final.
“Todo el mundo trabaja las 24 horas”, dijo un ingeniero del proyecto, que habló bajo condición de anonimato. “Será cuestión de minutos si todo está instalado a la medida de la gente que paga tanto”, explicó a la agencia de noticias AFP este experto.
Por su parte, un portavoz del grupo Accor, que administrará los hoteles Fairmont y Raffles en Katara Towers, insistió en que estarían listos para los "invitados de la FIFA" durante la Copa del Mundo y luego abrirían oficialmente después del torneo.
A cuarenta kilómetros de distancia, en Barwa Barahat Al Janoub, otro ejército de trabajadores bajo focos por la noche y bajo la luz del sol abrasador durante el día, preparan los apartamentos para los aficionados que pagarán 84 dólares por noche por una cama de acero en una habitación compartida. El complejo de Barwa, en el semidesierto, albergará a más de 7.500 fanáticos de la Copa Mundial. Una fuente dijo que el proyecto, que está a diez kilómetros de una estación de metro, tiene que terminar cientos de habitaciones y que todos estaban inmersos en "una furiosa carrera contra el tiempo".
Un portavoz del comité organizador de Qatar aseguró que "todas las opciones de alojamiento en la Copa Mundial de la FIFA 2022 estarán listas a tiempo antes de que los seguidores, equipos y periodistas lleguen a Qatar para el torneo”. Los organizadores revelaron que se podrán usar 130.000 habitaciones en hoteles, apartamentos, cruceros y tiendas de campaña en el desierto. Pero algunos seguidores ya se han quejado de los precios y la disponibilidad.
Otras ciudades del Golfo, especialmente Dubai, registran un auge por la Copa del Mundo impulsado por los aficionados que se muestran reacios a quedarse en Qatar. En el puerto de Doha, habrá tres cruceros que pueden albergar hasta 13.000 personas que pagarán entre 179 y 800 dólares por noche. Por 423 dólares la noche, algunos seguidores estarán en tiendas de campaña tradicionales, pero con aire acondicionado, frente a la playa en Al Khor, al norte de Doha, con baños, televisores de pantalla plana y otros adornos de lujo. Además, ofertan mil tiendas de campaña de estilo beduino donde los fanáticos pueden experimentar un campamento al estilo qatarí sin aire acondicionado. Los organizadores no han anunciado el precio.
Algunos propietarios de Qatar tratan de sacar provecho de la Copa del Mundo, y piden más de 4.000 dólares por noche para los apartamentos de Doha. Un chalet de dos dormitorios se anuncia en booking.com a casi 50.000 dólares la noche. Mientras que el 80 por ciento de las 30.000 habitaciones de hotel de Doha están reservadas por la FIFA, algunas suites de mercado abierto se anuncian a a 5.500 dólares la noche.
