Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos y Kuwait reiteraron su apoyo a los planes de Bahréin para equilibrar su presupuesto, una medida que ayudará a su vecino en los mercados de capital de deuda a pesar de los retrasos en los planes para arreglar sus endeudadas finanzas.
Los tres aliados del Golfo ya extendieron un paquete de ayuda de 10.000 millones de dólares a Bahréin en 2018 para ayudarlo a evitar una crisis crediticia.
El mes pasado, Bahréin señaló que debido a la crisis del coronavirus de 2020, había pospuesto el objetivo para un presupuesto equilibrado hasta 2024 y anunció planes para aumentar el impuesto al valor agregado con el fin de impulsar las arcas estatales.
El programa de equilibrio fiscal, un conjunto de reformas destinadas a equilibrar el presupuesto, estaba vinculado a los 10.000 millones de dólares comprometidos.
Los ministros de Finanzas de Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos y Kuwait se reunieron el martes con su homólogo de Bahréin para discutir su progreso de mejora de sus finanzas.
“Los ministros acogieron con satisfacción los esfuerzos realizados por el Gobierno de Bahréin en la implementación del Programa de Equilibrio Fiscal y el progreso logrado a pesar de los desafíos planteados por la pandemia Covid-19”, manifestaron los tres países en un comunicado conjunto.
La deuda pública de Bahréin subió al 133 por ciento del producto interno bruto (PIB) el año pasado desde el 102 por ciento en 2019, según el Fondo Monetario Internacional.
