Emiratos Árabes Unidos (EAU) espera que las conversaciones nucleares en curso en Viena entre Irán y las potencias mundiales tengan éxito. El país del Golfo, situado a sólo treinta kilómetros de Irán, apuesta por un proceso de seguimiento del diálogo regional, según declaró este jueves Anwar Gargash, asesor diplomático del presidente de EAU, el jeque Khalifa.
"Tenemos nuestros ojos puestos en el proceso JCPOA", dijo Gargash, refiriéndose al Plan de Acción Integral Conjunto, el nombre formal del acuerdo nuclear.
“Queremos ver un proceso exitoso… pero esperamos que ese proceso también conduzca a algún tipo de acuerdo sobre un diálogo que involucre a más países y esa vía en sí misma también ayudará a cimentar esta visión que nosotros [EAU] estamos intentando para ampliar la estabilidad y la prosperidad en la región”, dijo.
En declaraciones al Instituto de los Estados Árabes del Golfo en Washington, Gargash no apoyó la imposición de sanciones adicionales a Irán si las conversaciones fracasan.
"No veo más sanciones como una solución ... Ya hay suficientes sanciones contra Irán", señaló.
Con anterioridad este jueves, The Wall Street Journal informó que Estados Unidos está considerando endurecer las sanciones económicas si no se llega a un compromiso en Viena.
"La diplomacia es el camino a seguir, pero al mismo tiempo, no tenemos mucho tiempo porque existe una preocupación real ... sobre lo que sucede en el lado nuclear", señaló Gargash, pidiendo a Irán que muestre más flexibilidad en las conversaciones.
El alto funcionario emiratí explicó que Teherán podría hacer más en asuntos regionales, especialmente cuando se trata de un alto el fuego en Yemen.
"Por todo lo que escuchamos, hay muy poca presión iraní sobre los hutíes hacia un alto el fuego", subrayó.
Con una nueva atmósfera de diálogo en la región, Irán debería reconocer el “nuevo entorno y ser más productivo en la región, ya sea que esa posición esté en Yemen o en el Líbano e Irak”.
Gargash elogió las relaciones bilaterales con Estados Unidos y calificó a Washington como el "aliado estratégico número uno" de EAU.
Teherán podría hacer más en asuntos regionales, especialmente cuando se trata de un alto el fuego en Yemen
En cuanto a la posición de Estados Unidos en Oriente Medio, aclaró que Washington debe esforzarse por lograr un equilibrio entre permitir que sus aliados regionales trabajen juntos y al mismo tiempo evitar conflictos prolongados.
“No tenemos ningún interés en involucrar a Estados Unidos en otro conflicto como Afganistán e Irak ... no tenemos ningún interés en emprender otra larga guerra en la región; de hecho, nuestro interés es tratar de evitarlo a toda costa, incluso tratando de maniobrar un situación tensa ”, dijo.
Sin embargo, advirtió sobre las terribles consecuencias si Estados Unidos se desconectara de Oriente Medio, una perspectiva que consideraba poco probable.
“Si Estados Unidos decide retirarse por completo de la región ... significa que las dos preocupaciones que tenemos van a ser problemáticas: una de ellas es llenar el vacío y la otra es la escalada. Necesitamos evitar los vacíos y debemos evitar la escalada”, manifestó Gargash.
También expresó su preocupación por la creciente competencia entre Estados Unidos y China.
“Nos preocupa que haya una delgada línea entre esta aguda competencia y la nueva Guerra Fría. Nosotros, como estado pequeño, estaríamos afectados negativamente por ello".
Gargash elogió las propuestas diplomáticas de EAU con Turquía, Irán, Siria, el CCG e Israel como parte de un restablecimiento audaz en su enfoque de los problemas regionales.
“Es importante gestionar estas diferencias y opiniones divergentes y reforzar otras áreas de cooperación”, concluyó.
