Tras meses de silencio en torno a Neom y su ambicioso proyecto 'The Line', la megaciudad que prometía revolucionar la vida urbana con un despliegue de rascacielos y tecnología de vanguardia, la situación comienza a desvelarse. En medio de disputas internas y un presupuesto recortado, el Gobierno saudí ha recurrido ahora al poder de las redes sociales y a los influencers para dar visibilidad a una urbe que aún se encuentra en pañales.
Con la intención de atraer a 1,5 millones de residentes para 2030, 'The Line' se ha topado con múltiples obstáculos que han retrasado su construcción. Sin embargo, un nuevo grupo de bloggers ha comenzado a compartir sus experiencias en esta ciudad desértica, donde aún predominan las viviendas prefabricadas y los paisajes industriales.
Una de las voces más destacadas es Jessica Herman, blogger con 17.000 seguidores en TikTok, que ha documentado su vida familiar en Neom. En uno de sus vídeos, muestra una noche típica en la “Comunidad Neom 1”, revelando espacios vacíos y el ambiente rudimentario de la zona. Aunque la influencer parece disfrutar de su día a día, la realidad se aleja considerablemente del glamour que se busca proyectar.
La crítica no ha tardado en aparecer. En redes sociales, usuarios como Joshua Hind han descrito Neom como un "complejo de expatriados insulso", mientras el periodista de ABC News, Matt Bevan, ironizaba sobre la estética industrial del lugar. Las opiniones se multiplican, con descripciones que van desde lo "lúgubre" a comparaciones con "una colonia de Marte".

Pero, ¿quiénes son realmente los habitantes de Neom? A medida que las publicaciones de estos influencers proliferan, surge la incertidumbre sobre su autenticidad. Recientemente, Herman desactivó su cuenta, lo que añade más preguntas sobre si ella y otros bloggers están siendo compensados por el gobierno para presentar una imagen optimista de la megaciudad.
Mientras tanto, las noticias sobre el desarrollo de Neom reflejan un panorama inquietante. Informes recientes han revelado acciones drásticas por parte de las autoridades saudíes, incluyendo autorizaciones para desalojos forzosos, algunos de los cuales han resultado en tragedias. Además, según el Wall Street Journal, la tensión interna en el proyecto ha llevado a peleas físicas y acusaciones graves entre ejecutivos, lo que pone de manifiesto el caos en el que se halla inmersa esta colosal inversión.
En un contexto donde los costes continúan ascendiendo, el futuro de Neom permanece en la cuerda floja. Mientras el mundo digital intenta dar vida a una visión optimista de esta ciudad del futuro, la cruda realidad podría ser un obstáculo demasiado grande para superar.