Las razones por las que Trump elige los países del Golfo Arábigo para su primer viaje al exterior
13 de mayo de 2025 (07:33 h.)
La cuestión de una posible normalización de relaciones entre Arabia Saudita e Israel también se subraya en este contexto, aunque la actual situación en Gaza complica las perspectivas
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha decidido repetir su elección del Golfo Arábigo como destino para su primer viaje al exterior en este nuevo mandato, continuando la tendencia que ya estableció en 2017. Este viaje, que abarca a Arabia Saudita, Qatar y Emiratos Árabes Unidos, se considera un indicativo de las prioridades de su política exterior.
Uno de los ejes fundamentales de esta visita es el fomento de relaciones económicas sólidas con estos países, que gracias a sus vastas reservas de petróleo y fondos de riqueza soberana, suponen una oportunidad valiosa para atraer inversiones significativas hacia EEUU. En este sentido, el profesor Abdullah Baabood, experto en relaciones del Golfo Arábigo, señala que Trump busca asegurar acuerdos económicos que podrían ascender hasta un billón de dólares, destacando el impacto positivo que tendría en la economía estadounidense.
Además de las intenciones comerciales, la situación geopolítica en Medio Oriente juega un papel crucial en esta visita. La búsqueda de financiación para la reconstrucción de Gaza tras el conflicto reciente y el manejo de la compleja relación con Irán son aspectos prioritarios en la agenda. Según analistas, Trump buscará colaboración de los aliados del Golfo en la liberación de rehenes en Gaza, mientras que plantea que las potencias regionales podrían ser clave en cualquier estrategia futura en la región.
La influencia del Golfo no solo se limita a la región, sino que también se extiende a la crisis global, como lo demuestra su papel mediador en las discusiones entre EEUU, Rusia y Ucrania. Los países del Golfo han adquirido una relevancia geopolítica importante, lo que lleva a Washington a reforzar sus vínculos con ellos.
Por último, la cuestión de una posible normalización de relaciones entre Arabia Saudita e Israel también se subraya en este contexto, aunque la actual situación en Gaza complica las perspectivas de avance en este sentido. A pesar de las tensiones, Trump, quien ya logró acuerdos históricos durante su primer mandato, mantendrá su impulso para fomentar la cooperación en el ámbito diplomático y económico en la región del Golfo.
Uno de los ejes fundamentales de esta visita es el fomento de relaciones económicas sólidas con estos países, que gracias a sus vastas reservas de petróleo y fondos de riqueza soberana, suponen una oportunidad valiosa para atraer inversiones significativas hacia EEUU. En este sentido, el profesor Abdullah Baabood, experto en relaciones del Golfo Arábigo, señala que Trump busca asegurar acuerdos económicos que podrían ascender hasta un billón de dólares, destacando el impacto positivo que tendría en la economía estadounidense.
Además de las intenciones comerciales, la situación geopolítica en Medio Oriente juega un papel crucial en esta visita. La búsqueda de financiación para la reconstrucción de Gaza tras el conflicto reciente y el manejo de la compleja relación con Irán son aspectos prioritarios en la agenda. Según analistas, Trump buscará colaboración de los aliados del Golfo en la liberación de rehenes en Gaza, mientras que plantea que las potencias regionales podrían ser clave en cualquier estrategia futura en la región.
La influencia del Golfo no solo se limita a la región, sino que también se extiende a la crisis global, como lo demuestra su papel mediador en las discusiones entre EEUU, Rusia y Ucrania. Los países del Golfo han adquirido una relevancia geopolítica importante, lo que lleva a Washington a reforzar sus vínculos con ellos.
Por último, la cuestión de una posible normalización de relaciones entre Arabia Saudita e Israel también se subraya en este contexto, aunque la actual situación en Gaza complica las perspectivas de avance en este sentido. A pesar de las tensiones, Trump, quien ya logró acuerdos históricos durante su primer mandato, mantendrá su impulso para fomentar la cooperación en el ámbito diplomático y económico en la región del Golfo.