Apple tiene previsto ampliar su programa de reciclaje y renovación de iPhones aceptando dispositivos de marcas diferentes como BlackBerry o que corran bajo el sistema operativo Android a cambio de los cuales entregará una tarjeta regalo a descontar en la compra de un iPhone, según informa el diario digital Emirates 24/7.
En un claro intento por ganar mayor cuota de mercado, Apple aceptará dispositivos Android en su programa de reciclaje de iPhone. Así lo anunciaban en primer lugar desde la web 9to5Mac aludiendo a fuentes próximas a la compañía que además confirman que dicha operación se extenderá a todo tipo de smartphones, entre los que destacan BlackBerry y la amplísima variedad de Android, cuyos poseedores recibirán a cambio de tarjetas regalo que se utilizarán para la compra de nuevos iPhones.
El nuevo programa se iniciará en las próximas semanas después de programas de formación para los empleados de las Apple Stores encargados de valorar y tasar estos dispositivos. Los trabajadores de las Apple Store se centrarán principalmente en el aspecto estético y la funcionalidad tras lo cual, establecerán un precio. En caso de que el usuario esté de acuerdo, éste podrá canjear de inmediato el importe como descuento en la compra de un iPhone o bien, obtener una tarjeta regalo que podrá utilizar más adelante.
Es la primera vez que Apple aceptará dispositivos no propios en su programa de intercambio, aunque los precios serán inferiores a los que se pueden obtener en el mercado de segunda mano entre particulares. Aún así, Israel Ganot, ex CEO de Gazelle, una compañía de comercio en línea de dispositivos móviles, apunta que “Apple puede permitirse pagar más que el valor de mercado para conseguir que el usuario cambie, basándose en la idea de que el cliente se enamorará del ecosistema iOS y permanecerá fiel a él por un largo tiempo”.
El nuevo programa de reciclaje será lanzado estratégicamente justo antes de que Samsung saque al mercado sus nuevos modelos Galaxy S6 y Galaxy S EDGE lo cual podría invitar a muchos usuarios a pensarlo dos veces antes de actualizar sus terminales surcoreanos.
