La joven que apareció hace cinco días desorientada y sin ningún tipo de documentación en la playa asturiana de La Ñora, está siendo tratada por los expertos en psiquiatría del hospital gijonés de Jove. La Guardia Civil, tras dar con la mujer, que calculan tiene unos 25 años, lo comunicó a los medios para que se hicieran eco de la noticia y que alguien pudiera saber de quién se trataba. Cinco días han pasado, y nadie hasta ahora ha denunciado su desaparición ni ha habido una sola llamada alertando de quién pudiera tratarse. Ni amigos, ni compañeros de piso, ni familiares, lamenta la Guardia Civil que lleva el caso.
Quienes la tratan tampoco han podido descifrar de qué país procede. Se expresa en inglés y entiende cuando le hablan en francés y en castellano. Fue encontrada por un grupo de pescadores sobre las seis de la madrugada del pasado jueves deambulando desorientada y descalza por la playa. Vestía una camiseta, un jersey y unos vaqueros. Dentro de éstos un billete de 50 euros y algunas monedas, por lo que los agentes no creen que le hubieran robado. Sus playeros aparecieron tirados en un contenedor cercano. En sus muñecas tenía escrito a boli en inglés "Sorry, I failed"("perdóname, he fallado"). Sólo recuerda que para llegar a esa playa, cercana a Gijón, cogió un tren desde Oviedo y luego un autobús.
En un primer momento fue conducida al hospital de Cabueñes en Gijón para un reconocimiento médico y neurológico. Presentaba unaherida superficial en la frente, pero su estado físico era bueno. Tampoco presentaba signos de agresión sexual. Por sus huellas dactilares no se han obtenido más datos, sólo que no tiene antecedentes.
La Guardia Civil no tiene muchas pistas y no pueden facilitar ninguna foto de la joven porque no está desaparecida ni tampoco incapacitada judicialmente. "No hay nada más por ahora" reconocen desde la Comandancia de Gijón.
El caso recuerda al de Piano man, el hombre que apareció en una playa inglesa en 2005 sin saber quién era y sin ninguna documentación. Su caso conmovió al mundo. Sólo se comunicaba tocando el piano. Tras varios meses de tratamiento, recuperó la memoria.
