Hacer un viaje de 60.000 dólares estadounidenses por todo el mundo es aparentemente algo inalcanzable para la mayoría de los ciudadanos, a menos que sigamos los pasos de Sam Huang, según informa Usa Today.
El joven de 26 años, que es originario de Pasadena, Estados Unidos, simplemente descubrió la manera de volar alrededor del mundo en la cabina de primera clase, que es como un hotel de lujo, de la aerolínea Emirates con un 99,5% de descuento sobre el valor total de la tarifa. El pago lo realizó sólo con millas de viajero frecuente y unos 300 dólares en efectivo.
A Sam Huang, que es como se llama el afortunado viajero, le llevó un año acumular millas de la compañía Alaska Airlines - que se pueden canjear por vuelos de Emirates - abriendo dos tarjetas de crédito del Bank of America, que cada una venía con un bono de registro 25.000 millas. Abrió tanto una tarjeta personal como de negocios, completó el gasto mínimo y luego repetía el proceso cada 91 días. Con el tiempo consiguió más de 200.000 millas de Alaska Airlines, todo sin hacer un solo vuelo de la aerolínea.
Cuando Huang estaba listo para reservar su viaje de "low cost" (que incluyó 11 ciudades, siete países y cinco continentes) se aprovechó de un vacío legal: Alaska no tiene ninguna restricción de enrutamiento, y le permitió tomar escalas de 24 horas en varias ciudades a lo largo de su ruta planificada.
Así, a pesar de sus temores de que alguien podría averiguar lo que había hecho, fue capaz de completar con éxito, 60.000 dólares en reservas - el viaje de su vida - por unos 300 dólares en impuestos y tasas. La tarjeta de crédito de Alaska Airlines viene con un cargo de 75 dólares, pero Huang asegura que recibió 100 dólares en créditos después de un gasto mínimo para equilibrar esa tasa.
Ni que decir tiene, que disfrutó cada segundo que pasaba en la suite de Emirates primera clase, de los suelos con calefacción fuera de la ducha en la suite, bailando con su pijama de cortesía y básicamente comiendo y bebiendo de todo (el muesli, el Hennesy Paradis, ...) describió sus vuelos como los mejores que había conocido.
Y aunque Huang puede inspirar a otras personas para soñar a lo grande, el hombre realiza un par de advertencias. "Si usted no puede pagar sus cuentas plenamente todos los meses, por favor no juegue con las tarjetas de crédito, y aunque Alaska ha subsanado la laguna jurídica particular que él explotó, asegura que está estudiando otra alternativa.
