Hace unas horas, antes de escribir estas líneas, ha salido el humo blanco de la chimenea que se había instalado especialmente en uno de los techos del Vaticano y tras esa estela, apareció ante el mundo un cardenal que se convierte en León XIV, el papa No. 267 en la historia. Se trata de Robert Prevost, un hombre que se podría definir como el símbolo mismo de la migración y sin duda un americano por partida doble.
Robert Francis Prevost Martínez, es personificación de los movimientos migratorios, desde el origen de sus padres, el francés del padre y el español de la madre, y él mismo saliendo muy joven de su Chicago natal. Un misionero es aquel que no sólo va a difundir la palabra de Dios, sino que está dispuesto a ir a cualquier parte del mundo a colaborar, a dar una mano, siendo cercano a los problemas, carencias y dramas de la gente real.
El nuevo papa, es matemático, filósofo, y fue profesor de física, licenciado en derecho canónico, es decir que también es abogado, tenista aficionado y no está claro si sigue a uno de los equipos de beisbol de Chicago, los Cubs o los White Sox o si tiene una preferencia por algún club de fútbol.
León XIV pertenece a la orden de San Agustín y apenas fue ordenado sacerdote, salió como misionero al Perú. En 2013 regresaría a Chicago al Convento de San Agustín pero un año más tarde el papa Francisco lo nombraría obispo titular en Chiclayo, ciudad al noroccidente del Perú, cercana al Océano Pacifico, obtendría la nacionalidad peruana y entre otros altos cargos llegó a ser presidente de la Pontificia Comisión para América Latina.
Los colombianos hemos demostrado ser muy creativos a la hora de titular los nombramientos de sumos pontífices, ya lo expresó Javier Cercas en su libro 'El loco de Dios en el fin del mundo', cuando le contaba al papa Francisco, la manera cómo el desaparecido periódico gratuito Mío, publicación de la casa editorial El Tiempo, tituló: "Argentino, pero modesto". Héctor Abad Faciolince recordaba que unos años atrás, el periódico El Espectador había titulado "El pastor alemán", para referirse a Benedicto XVI. Dado que el papa León XIV, es mitad peruano y Perú, como Colombia, es productor mundial de papas (esos tubérculos que en España llaman patatas), se podría pensar en algo, pero lo dejo a la imaginación de los lectores.

Para quienes amamos Chicago y tenemos tantos lazos de cariño con Perú y sus habitantes, la elección del actual papa, es una doble alegría y sirve para ensalzar el verdadero significado de la palabra americano, que erróneamente se suele tomar como estadounidense, pero que realmente alude a cualquier poblador de todo el continente y Robert Francis Prevost es doblemente americano, estadounidense y peruano. Se le considera moderado, pero muy cercano a su antecesor, el papa Francisco.
El papa León XIV, ha visitado varias veces Colombia, siendo superior general de la Orden de San Agustín, como por ejemplo el Liceo Cervantes Norte, en donde se tomó la fotografía que se adjunta. Sea el momento de recordar que varios pontífices han estado en Colombia. Pablo VI en 1968 en Bogotá, en la primera visita de un papa al continente americano, Juan Pablo II en un viaje que algunos todavía recordamos, Joseph Ratzinger antes de ser Benedicto XVI estuvo tres veces en Colombia y los que estuvieron con él, lo rememoran con una imagen diferente a la que se le atribuía como serio y distante, todo lo contrario, alguien de muy buen humor y que gustaba de tocar el piano luego de las jornadas de estudio y trabajo. Por último el inolvidable Francisco, quien visitó varias ciudades colombianas. Esperamos que el papa León XIV, regrese a Colombia, en donde no sólo ahora, sino desde antes ya tenía muchos afectos.
En una de las visitas a Bogotá, siendo el cardenal Robert Prevost presidente de la Pontificia Comisión para América Latina (CAL), durante un encuentro con instituciones y organizaciones de ayuda a la Iglesia, en marzo de 2024, recibió una carta del papa Francisco en la cual reflexionaba sobre el concepto de gratuidad y entre otras ideas decía: “…podemos concluir que la gratuidad es imitar la manera que tiene Jesús de entregarse por nosotros, su Pueblo, siempre y totalmente, a pesar de nuestra pobreza. Y ¿por qué? Por amor”. Ese amor tan característico de los misioneros.
Finalmente, desearle al papa León XIV todos los éxitos al frente de su delicada misión como líder de los católicos del mundo. Dios le bendiga e ilumine para que sea un papa que defienda las causas justas y continúe su camino como misionero y migrante americano.
--------------------------
Dixon Moya es diplomático colombiano de carrera, escritor por vocación, lleva un blog en el periódico colombiano El Espectador con sus apellidos literarios, en el cual escribe de todo un poco: http://blogs.elespectador.com/lineas-de-arena/ En Twitter (a ratos muy escasos) trina como @dixonmedellin.