La procesada es una madre casada que fue declarada culpable de adulterio en agosto, mientras que el hombre soltero implicado en el caso fue castigado con 100 latigazos
Cuando el marido regresó a casa y revisó sus cámaras de vigilancia vio a la dama salir del inodoro luego tomar algo de su bolsillo y verterlo en una taza