Dubai Airports anunció el jueves una colaboración histórica con Etihad Clean Energy Development Company, una subsidiaria de propiedad absoluta de la Autoridad de Electricidad y Agua de Dubai (DEWA) , para lanzar el proyecto de instalación de paneles solares en azoteas más grande del mundo en un aeropuerto.
El anuncio se hizo en presencia del presidente del Consejo Supremo de Energía de Dubai, presidente de Aeropuertos de Dubai y presidente y director Ejecutivo de Emirates Airline and Group, el jeque Ahmed bin Saeed Al Maktoum, y el vicepresidente del Consejo Supremo de Energía de Dubai y director general y CEO de la DEWA, Saeed Mohammed Al Tayer.
Para consolidar esta ambiciosa iniciativa, Dubai Airports y Etihad Energy Services Company formalizaron el acuerdo durante la Cumbre Mundial de Economía Verde (WGES, por sus siglas en inglés) que fue firmado por el director ejecutivo de Dubai Airports, Paul Griffiths, y el director ejecutivo de Etihad ESCO, Waleed Alnuaimi.
Según la agencia estatal de noticias WAM, los paneles solares compensarán 23.000 toneladas de CO2 al año, lo que equivale a retirar 5.000 automóviles de la circulación o suministrar energía a 3.000 hogares durante un año.
La energía solar cubrirá el 6,5% de las necesidades energéticas del DXB y el 20% de las del DWC, respaldando así el compromiso de los aeropuertos de Dubai con unas operaciones más limpias, inteligentes y sostenibles.
Al Tayer subrayó que, si bien la hoja de ruta establece el objetivo de lograr que el 25% de la combinación energética proceda de fuentes limpias para 2030 y el 100% para 2050, se están acelerando los esfuerzos. Espera que la capacidad de energía limpia alcance potencialmente el 27% en 2030.
Según Griffiths, los aeropuertos son importantes consumidores de energía, lo que supone tanto oportunidades como responsabilidades para impulsar un cambio real. "Para nosotros, no se trata sólo de instalar paneles solares, sino de integrar la sostenibilidad en el núcleo de todo lo que hacemos. Cada kilovatio que generamos a partir de fuentes renovables nos acerca más a la reducción de nuestra huella de carbono y a la garantía de futuro de nuestras operaciones. Se trata de marcar la pauta y liderar el camino de lo que puede conseguir un aeropuerto verdaderamente sostenible.