Emiratos Árabes Unidos dejó claro que no puede haber tolerancia con el terrorismo en Yemen, después de que Daesh reclamara un ataque este viernes que dejó varios muertos entre las tropas locales.
Los ataques aéreos de EAU contra objetivos en Adén garantizarán que Al Qaeda en la Península Arábiga (AQAP) y Daesh no puedan recuperarse mientras la Coalición Árabe continúa su campaña contra los hutíes, declaró el Ministerio de Exteriores de EAU.
Existe la preocupación de que Al Qaeda haya utilizado los recientes combates en Adén para atacar a las fuerzas de la Coalición utilizando dispositivos explosivos improvisados (IED). Los ataques aéreos de EAU el miércoles y el jueves debían enviar un mensaje de que ningún grupo terrorista se librará en Yemen, informó el Ministerio de Asuntos Exteriores de EAU.
"La operación se llevó a cabo de conformidad con las reglas de compromiso de la Coalición y los principios aplicables del derecho internacional, incluida la Convención de Ginebra", detalló el Ministerio de Asuntos Exteriores de los EAU en un comunicado. La misión se produjo en respuesta a grupos armados afiliados a milicias terroristas que atacaron a las fuerzas de la Coalición en el aeropuerto de Adén.
"En las últimas semanas, la actividad terrorista en Yemen ha aumentado la amenaza a la Coalición y socava los esfuerzos para combatir a Al Qaeda y los hutíes respaldados por Irán, los cuales buscan beneficiarse de la situación inestable", señaló el Ministerio emiratí.
En ese contexto, Emiratos Árabes Unidos está preocupado por la proliferación del terrorismo en Yemen. La operación emiratí "se basó en inteligencia de campo confirmada de que las milicias se prepararaban para atacar a las fuerzas de la Coalición, un desarrollo que requería una operación preventiva para evitar cualquier amenaza militar", agregó el comunicado.
Según los expertos, Daesh ha estado reconstruyendo y reorganizando sus redes en todo el mundo. Ha forjado alianzas con grupos terroristas en Asia, África y Oriente Medio. Ha creado un movimiento global que consiste en numerosas franquicias con capacidad para organizar ataques terroristas significativos. Las sucursales de Al-Qaeda incluyen AQMI en el Magreb, AQAP en Yemen, AQIS en el sur de Asia, JNIM en Malí y Al Shabab en Somalia y África Oriental. Otro grupo, Hayat Tahrir al-Sham en Siria, también se considera asociado con Al Qaeda.
El pasado 1 de agosto, dos ataques separados en Adén por parte de los rebeldes de Al Qaeda y los hutíes mataron a 49 personas, en su mayoría combatientes separatistas del Consejo de Transición del Sur (STC).
El STC acusó al Gobierno de complicidad en los ataques, lo que provocó el enfrentamiento entre las dos partes.
EAU, que tiene una política de tolerancia cero hacia los islamistas, cree que parte del ejército de Yemen está compuesto por militantes de Al Islah, un partido considerado cercano a la Hermandad Musulmana.
