jueves. 28.03.2024

Dos científicos han obtenido subvenciones de 1,5 millones de dólares cada uno para apoyar los esfuerzos de Emiratos Árabes Unidos de impulsar la siembra de nubes y mejorar la seguridad del agua.

Los ganadores del cuarto ciclo de subvenciones del Programa de Investigación para la Ciencia de Mejora de la Lluvia de EAU fueron seleccionados luego de una búsqueda global, que comenzó con 81 propuestas de 378 científicos e investigadores afiliados a 159 instituciones en 37 países.

Bradley Baker, del Centro Nacional de Investigación Atmosférica con sede en Estados Unidos y  Luca Delle Monache, de la Universidad de California-San Diego, utilizarán los fondos para llevar a cabo sus proyectos de investigación de tres años, que incluirán pruebas en  Emiratos.

El anuncio de los beneficiarios de las subvenciones se realizó en el Pabellón de EAU en la Expo 2020 Dubai este jueves.

La siembra de nubes ha formado parte integral del impulso de EAU para aumentar las precipitaciones en climas áridos desérticos durante décadas.

El aumento de la lluvia se considera clave para satisfacer las necesidades de agua y ayudar a la agricultura, lo que permitiría que Emiratos dependiera menos de las importaciones de alimentos y se vuelva autosuficiente.

Más de 100 estaciones meteorológicas están ubicadas en todo el país, incluida una red de radares, aviones diseñados a medida y una fábrica para producir bengalas de sal higroscópicas de alta calidad para sembrar.

Roelof Bruintjes, que aceptó el premio en nombre de Baker, dijo que su propuesta de investigación implica el uso de nanomateriales higroscópicos para mejorar la lluvia. Agregó que las bengalas de sal que EAU utiliza actualmente son demasiado pequeñas para los tipos de nubes que se encuentran sobre el país. “Están usando bengalas de sal, pero son muy pequeñas. Con el nanomaterial, atrae el agua más rápidamente”, manifestó al diario The National.

“Los nanomateriales son partículas de sal con una nanocapa, cloruro de tritio, que atrae el agua más rápidamente. Debido a que cada cristal en la atmósfera se forma en una partícula, dependiendo de su tamaño, se obtienen gotas más grandes o más pequeñas. “Queremos que las gotas y las partículas choquen rápidamente, para que se conviertan en gotas más grandes y creen una lluvia mucho más eficiente”.

Los científicos de la Universidad Khalifa de Abu Dhabi desarrollaron los nanomateriales en el primer ciclo del programa de mejora de la lluvia.

Bruintjes dijo que su centro enviaría los nanomateriales a las nubes utilizando un avión con un instrumento especial capaz de dispararlos. Realizarán entre 40 y 50 horas de vuelo en el verano de 2023 para probar el método en EAU.

Los instrumentos también pueden medir las partículas de aerosol y el tamaño de las gotas, así como tomar imágenes de las partículas, lo que ayudará a los investigadores a ver la evolución de la lluvia en una nube.

Señaló que medir los cristales de hielo en la nube también es importante porque pueden crecer más que las gotas de agua. Una vez que se derriten, caen como lluvia.

Por otro lado, la propuesta de investigación de Monache consiste en desarrollar un prototipo de algoritmo de inteligencia artificial que prediga las posibilidades de lluvia.

“Utilizamos información proveniente de datos satelitales, radares y predicciones meteorológicas numéricas. Combinamos toda esta información para obtener las estimaciones”, declaró Monache.

Emiratos entrega a dos científicos tres millones de dólares para aumentar la lluvia
Comentarios