Pena de muerte en Emiratos Árabes: Un análisis de su evolución y aplicación

Tribunal Penal de Abu Dhabi. (WAM)
Reformas recientes, como las modificaciones en las leyes sobre tráfico de drogas en 2022, han reducido los delitos que conllevan la pena capital

La pena de muerte sigue siendo una forma legal de castigo en Emiratos Árabes Unidos, aunque su aplicación ha experimentado transformaciones significativas en las últimas décadas. Esta pena se aplica de acuerdo con la ley islámica y el derecho civil en un sistema jurídico complejo que integra elementos de ambas normativas.

Históricamente, EAU mantuvo ejecuciones más frecuentes tras su formación en 1971, reflejando una postura firme frente a delitos graves como el asesinato, terrorismo y espionaje. Sin embargo, la tendencia actual muestra una disminución notable en su implementación. Factores como la presión internacional por los derechos humanos y los cambios en la estructura demográfica del país han influido en esta evolución.

El proceso judicial para casos que pueden resultar en la pena de muerte es riguroso, involucrando múltiples niveles de apelación e incluso la posibilidad de clemencia del gobernante del emirato correspondiente. Además, el concepto islámico de 'diya' o 'dinero de sangre', que permite el perdón a cambio de compensación económica, añade otra capa de complejidad al tema.

Reformas recientes, como las modificaciones en las leyes sobre tráfico de drogas en 2022, han reducido los delitos que conllevan la pena capital, reflejando un cambio hacia normas más indulgentes. No obstante, el compromiso de EAU con la seguridad pública y el orden interno sigue siendo firme, lo que mantiene la pena de muerte como parte integral de su marco legal.

Con este contexto, Emiratos Árabes continúa navegando entre sus tradiciones culturales y las crecientes demandas por una modernización en sus leyes, mientras evaluan el futuro de la pena de muerte en el país.

Un caso judicial que tuvo lugar en 2017 fue una muestra de la pena capital. En esa ocasión, un tribunal de Abu Dhabi dictó sentencia de muerte por fusilamiento contra una ciudadana emiratí condenada por el asesinato en diciembre de 2014 de una maestra de escuela estadounidense. En noviembre de ese mismo año, el fiscal general de Dubai, Essam Eisa Al Humaidan, anunció que el jordano Nidal Eisa Abdullah, declarado culpable del secuestro, violación y asesinato de un niño de ocho años, fue ejecutado por un equipo especial que llevó a cabo la sentencia.