La atención no es una cualidad natural del ser humano, sino que deriva de la curiosidad. Vivimos en una época en la que nadie sabe hacer una sola cosa a la vez, y ello es causa de la falta de concentración. Sin embargo, a casi 400 km/hora y en el cielo, no hay otra opción que focalizar y trabajar la concentración.
Juan Velarde es un afortunado, pues comparte pasión y profesión. No tiene vértigo a las alturas, pero tampoco a las exigencias de la competición. A lo largo de su carrera deportiva ha participado en el equipo nacional de vuelo acrobático, se ha proclamado campeón de España y ha competido en la red Bull Air Race, la Fórmula 1 del cielo
El tiempo de reacción del piloto es escaso, concretamente entre 1.5s y 2s, por lo que se requiere de muchísima preparación previa. No obstante, esto es extrapolable a cualquier aspecto diario. En el trabajo, pueden surgir situaciones de cambio repentino y saber cómo actuar y cómo gestionar dicha situación requiere de preparación previa, del mismo modo que ante un examen sorpresa.
En el vuelo, para poder rendir al máximo en competición y poder llegar a fluir dentro del circuito, el piloto ha de visualizar antes de la carrera decenas de veces la trazada que deberá seguir, para así representar la sensación experimentarán dentro del avión.
En este proceso es importante visualizar las figuras que se realizarán con el avión, porque en el aire el piloto no podrá dudar, como explica en la Masterclass. Es como un examen tipo test, en el que la primera intuición es siempre la correcta, y no has de pensártelo dos veces, porque si no, fallarás.
Además, el piloto debe realizar ejercicios de concentración y secuencia, para llegar a un nivel óptimo a la hora de competir. Y es que, como cualquier futbolista debe realizar ejercicios físicos; como cualquier modista, ha de realizar diversos patrones y elegir el definitivo a base de prueba/error; como cualquier cocinero, al investigar, innovar y probar sus platos. Por ello el piloto, tal y como recomienda Juan Velarde, deberá prepararse con el calentamiento físico, cognitivo, visual y mental, para introducirse de manera plena en la competición, en el reto que ha de afrontar
Y aunque haya muchos métodos diferentes para mantener la concentración, uno de los más efectivos, según Velarde, es concentrarse en la respiración y así, evadirte de los estímulos exteriores y evitar cualquier despiste que pueda ser crucial.
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