El presidente del Parlamento Árabe, Mishaal bin Fahm Al-Salami, ha condenado en los términos más enérgicos la "continuación de las violaciones de la milicia golpista hutí y sus actos criminales contra miembros de la Cámara de Representantes de la República de Yemen", quienes rechazaron el golpe y "se pusieron del lado de la legitimidad".
En una declaración difundida ayer, el presidente del Parlamento Árabe reafirmó rechazó categórico al golpe de estado de la milicia hutí y a "las prácticas criminales, actos terroristas y graves violaciones contra los diputados del pueblo yemení", entre las que citó penas de muerte contra periodistas, políticos y "cualquier persona que se oponga a sus prácticas".
Al-Salami ha remitido mensajes escritos al secretario general de las Naciones Unidas, al presidente de la Unión Interparlamentaria y al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en los que pide la adopción de "medidas urgentes para obligar a la milicia hutí a detener estas violaciones y actuaciones ilegales contra los representantes elegidos por el pueblo yemení".
En sus misivas también recuerda que tienen inmunidad parlamentaria, por lo que es necesario que se les proporcione protección legal.
"La milicia hutí impide la paz que busca el pueblo yemení y obstaculiza los esfuerzos internacionales que persiguen lograr una paz duradera en Yemen", dijo.
Asimismo hizo hincapié en que la "milicia golpista viola el derecho internacional humanitario, los pactos y normas internacionales, las resoluciones de las Naciones Unidas y los tratados internacionales".
