Estados Unidos lanzó este viernes un ataque contra posiciones de los rebeldes iraquíes, ante lo que parecen señales de presión de los militantes del Estado Islámico (EI) contra la ciudad de Irbil, en la que se encuentran asesores militares y personal diplomático estadounidenses y cuya protección ha desencadenado la actuación de Washington, según informa el diario ABC en una noticia firmada por Emili J. Blasco.
Esta nueva incursión incluyó un drone contra una posición de mortero, según informó el Pentágono, en las inmediaciones de Irbil. Algo más de una hora después se produjo un ataque de cuatro cazas F-18, procedentes del portaaviones George H. W. Bush, situado en el Golfo Arábigo. Los aviones pasaron dos veces sobre un convoy de siete vehículos parados y una posición de mortero, y arrojaron en total ocho bombas, de acuerdo con detalles ofrecidos por la CNN. Los ataques selectivos en Irak contra los yihadistas del Estado Islámico (EI) habían sido anunciados por el presidente Barack Obama.
El Pentágono ha confirmado que dos cazas de la Fuerza Aérea estadounidense han lanzado sendas bombas de quinientas libras (227 kilos) contra unidades rebeldes que estaban moviendo artillería hacia la ciudad de Erbil. La Casa Blanca no descarta que haya más ataques y recuerda que ha dado «luz verde» al Pentágono para ataques aéreos limitados, en caso de estimarse necesario.
Unas diez horas antes Obama había comparecido ante las televisiones estadounidenses para anunciar que había autorizado posibles ataques en caso de que el avance de los radicales islamistas amenazara Erbil, en el noreste del país, donde se encuentran una cuarentena de asesores militares y diplomáticos de EE.UU. También advirtió que habría ataques si los yihadistas actuaban contra los casi 40.000 yasidíes, miembros de una secta religiosa, que se encuentran acorrolados en la montaña de Sinjar, en el noroeste.
Las fuerzas kurdas ("peshmergas"), según informa la agencia EFE, han lanzado una ofensiva militar, con ayuda de aviación, para recuperar los territorios ocupados por el Estado Islámico (EI) en las cercanías de la ciudad de Mosul, norte de Irak, informó a Efe el general kurdo Abdelrahman Kurini.
En la mañana del sábado se registraban fuertes enfrentamientos, con ayuda aérea militar -la fuente no pudo aclarar si son aviones iraquíes o estadounidenses-, en las regiones que rodean Mosul y que fueron ocupadas por el EI, después de que los kurdos se retirasen de ellas hace dos días.
