El Tribunal de Casación de Dubai ha instaurado un nuevo principio legal que establece que un empleado no puede ser despedido arbitrariamente.
El tribunal, en su fallo, también confirmó que una compañía, que termina con los servicios de un empleado tiene que pagar tres meses de salario como compensación, si el despido se demuestra que es improcedente.
El juez también dictaminó que un finiquito al terminar el servicio se basará en el sueldo del último contrato firmado entre la empresa y el empleado.
El tribunal dictaminó que si en el último contrato firmado por la compañía se aprecia una subida en el salario básico del empleado, el empleado tiene derecho a obtener la gratuidad de fin de servicio basado en el nuevo salario, siempre y cuando la empresa no puede demostrar que el contrato es nulo.
Los principios anteriores se basan en un veredicto del Tribunal de Casación emitido en un caso que involucró a un Gerente de Desarrollo (Development Manager) que solicitaba 180.000 dirhams como compensación por parte de la empresa, que según él arbitrariamente lo despidió.
El tribunal falló a favor del trabajador obligando al pago por parte de la empresa de un finiquito al final de su servicio sobre la base de su último salario mensual.
El demandante explicó que se unió a la compañía hace año y medio con un salario mensual de 60.000 dirhams.
Alegó que la compañía había retrasado el pago de los últimos salarios y él presentó una denuncia ante el Ministerio de Trabajo. Entonces, la empresa lo despidió alegando mala administración de los proyectos.
La empresa alegó en su recurso que el empleado renunció voluntariamente a su puesto en una carta en la que escribió que quería mantener una reunión para hablar su salida de la empresa.
El Tribunal de Casación rechazó la demanda de la empresa.
