Condenado en Abu Dhabi por insultar y humillar en público
07 de febrero de 2025 (08:46 h.)
Según la demanda, el ataque verbal no solo ofendió su honor, sino que también le causó un daño emocional significativo
El Tribunal de Asuntos Familiares, Civiles y Administrativos de Abu Dhabi ha determinado que un cliente deberá abonar 7.000 dirhams como compensación a un vendedor de una tienda, tras considerar que su comportamiento provocó gran vergüenza y humillación al agredirlo verbalmente en público frente a varios testigos.
Los hechos se desarrollaron cuando el cliente acudió a la tienda con la intención de solicitar un reembolso, el cual fue negado por la gerencia siguiendo su política interna. Ante esta negativa, el cliente reaccionó de manera violenta, gritando insultos hacia el vendedor y desplegando un acto de desprecio al derramar una botella de agua en el suelo del establecimiento.
El vendedor, profundamente afectado por el incidente, decidió emprender acciones legales contra el cliente, demandándolo por 30.000 dirhams en concepto de daños y perjuicios, además de los gastos legales derivados del proceso. Según la demanda, el ataque verbal no solo ofendió su honor, sino que también le causó un daño emocional significativo, pues tuvo que lidiar con la vergüenza ante sus compañeros y los clientes presentes en la tienda.
Como resultado de la denuncia presentada ante la policía, se llevó a cabo una investigación que culminó con la remisión del acusado al Juzgado Penal. La corte, tras evaluar las pruebas presentadas, dictó una sentencia condenatoria, imponiendo al cliente una multa de 5.000 dirhams. Esta decisión fue ratificada en apelación y se confirmó después de que expirara el plazo para presentar nuevos recursos.
La resolución del tribunal destaca la importancia de mantener el respeto y la dignidad en las interacciones comerciales, así como la seriedad con la que se abordan los ataques verbales y la violencia hacia el personal de ventas en los establecimientos.
Los hechos se desarrollaron cuando el cliente acudió a la tienda con la intención de solicitar un reembolso, el cual fue negado por la gerencia siguiendo su política interna. Ante esta negativa, el cliente reaccionó de manera violenta, gritando insultos hacia el vendedor y desplegando un acto de desprecio al derramar una botella de agua en el suelo del establecimiento.
El vendedor, profundamente afectado por el incidente, decidió emprender acciones legales contra el cliente, demandándolo por 30.000 dirhams en concepto de daños y perjuicios, además de los gastos legales derivados del proceso. Según la demanda, el ataque verbal no solo ofendió su honor, sino que también le causó un daño emocional significativo, pues tuvo que lidiar con la vergüenza ante sus compañeros y los clientes presentes en la tienda.
Como resultado de la denuncia presentada ante la policía, se llevó a cabo una investigación que culminó con la remisión del acusado al Juzgado Penal. La corte, tras evaluar las pruebas presentadas, dictó una sentencia condenatoria, imponiendo al cliente una multa de 5.000 dirhams. Esta decisión fue ratificada en apelación y se confirmó después de que expirara el plazo para presentar nuevos recursos.
La resolución del tribunal destaca la importancia de mantener el respeto y la dignidad en las interacciones comerciales, así como la seriedad con la que se abordan los ataques verbales y la violencia hacia el personal de ventas en los establecimientos.