viernes. 26.04.2024

El Tribunal de Delitos Menores de Dubai condenó a un asiático a un mes de cárcel y lo multó con 5.000 dirhams por chantajear a un adolescente compatriota y obligarlo a robar las joyas de su madre tras amenazarlo con enviar un vídeo de él fumando a sus padres. Será deportado tras cumplir la pena.

El caso se remonta a mayo pasado, cuando una asiática presentó una denuncia en la que alegaba que su hijo había sido chantajeado por un asiático, que lo obligó a robarle joyas por valor de 60.000 dirhams. Explicó que el comportamiento de su hijo no era normal y que recibía muchas llamadas telefónicas, que atendía en privado en el balcón de la casa.

En el interrogatorio, la madre declaró que revisó el iPad de su hijo, donde encontró conversaciones con otra persona a través de su cuenta de Instagram. En ese chat vio fotos de sus joyas y frases insultantes enviadas por el sospechoso a su hijo. Al revisar sus joyas notó la desaparición de 18 piezas, por lo que confrontó a su hijo, quien admitió que fue chantajeado por el sospechoso.

La víctima afirmó que había conocido al sospechoso hacía cuatro meses, y que siempre salía con él. Un día, el sospechoso le pidió 3.000 dirhams con el pretexto de que había tenido un accidente y cuando la víctima se negó, el sospechoso amenazó con enviar un vídeo de él fumando cigarrillos a sus padres.

También amenazó con que si no entregaba el dinero lo implicaría en casos penales, ya que le hizo creer que tenía conexión con la policía. El adolescente  tuvo miedo, por lo que robó las joyas de su madre y se las entregó, pero no quedó conforme con lo obtenido y continuó con las amenazas, por lo que le entregó por segunda vez más joyas, hasta que su madre descubrió lo sucedido.

Un policía afirmó que había citado al sospechoso, quien negó haber chantajeado al adolescente y confirmó que este último le había dado el dinero como ayuda para reparar su vehículo. Al revisar el expediente del sospechoso, se averiguó que había estado involucrado en dos denuncias de robo por parte de su padre, quien lo acusó la primera vez de robar tres millones de dirhams, y la segunda vez lo acusó de robar 80.000, pero luego retiró las denuncias.  

El oficial también dijo que un equipo de investigación acudió a la tienda de venta de oro, donde el vendedor informó que el sospechoso acudió dos veces, la primera con una persona compatriota, quien aseguró que el oro era de su madre y quería venderlo. El vendedor compró el oro por 3.500 dirhams. En la segunda vez, el sospechoso acudió con una chica del Golfo que afirmó que las joyas le pertenecían a ella, por lo que el vendedor las compró por 1.350 dirhams.

La joven y la otra persona fueron citadas, y admitieron que el sospechoso les pidió que lo ayudaran a vender sus joyas.

Encarcelado en Dubai por obligar a un adolescente a robar el oro de su madre
Comentarios