Dos expatriados asiáticos atrajeron a una chica también de Asia a una villa alquilada de Dubai donde la violaron y robaron 7.000 dirhams. También la obligaron a darles su contraseña de una aplicación de compras y transferir 180.000 dirhams de su cuenta bancaria a varias personas en su país de origen.
El Tribunal Penal del emirato los condenó a diez años de cárcel seguidos de la deportación y les impuso una multa de 187.000 dirhams.
Según los detalles del caso, los hechos ocurrieron en octubre del año pasado cuando un joven asiático invitó a la chica a tomar café y dar un paseo y ella accedió.
La víctima afirmó en las investigaciones que el sospechoso, acompañado de otro hombre, llegó a la hora acordada y le pidió que subiera a su coche en el que se trasladaron directamente a una villa, donde la obligaron a entrar después de amarrarla y amordazarla con cinta adhesiva.
Asimismo, la chica declaró que después de que la secuestraron, los sospechosos le robaron 7.000 dirhams que tenía en su poder antes de obligarla a darles su tarjeta de cajero automático y su PIN y, como resultado, pudieron acceder a un sitio de compras y comprar artículos por valor de 180.000 dirhams para varias personas en su país de origen.
Los dos sospechosos la violaron y usaron el teléfono móvil de uno de ellos para filmarla en posiciones indecentes, sostuvo la víctima. Se quedaron con los vídeos y su pasaporte y amenazaron con publicarlos en las redes sociales. Sin embargo, ella logró escapar de la villa dos días después y denunció el incidente a la policía.
Un oficial afirmó en las pesquisas que un equipo de detectives logró identificar a los dos sospechosos. La policía descubrió que los sospechosos abandonaron su lugar de residencia y alquilaron un apartamento de hotel en la zona de Al Riqqa. Fueron detenidos y uno de ellos confesó que conoció a la chica a través de las redes sociales y acordó con ella tener sexo por 3.000 dirhams. El día del hecho, la joven llegó al lugar acordado y subió a su coche, en el que se encontró con el segundo sospechoso. El policía agregó que encontró los vídeos en el teléfono móvil del sospechoso.
