Un hombre había presentado una demanda contra una compañera en la que la acusaba de dañar su reputación por denunciar que la insultó y la agredió. Exigió 250.000 dirhams en compensación por los daños morales y materiales.
El demandante argumentó que le prestó algo de dinero a la mujer, y ella se lo devolvió solo después de que presentó una denuncia en su contra. Además la mujer presentó otra demanda por presuntamente golpearla e insultarla en su lugar de trabajo. Sin embargo, el tribunal lo absolvió de los cargos por falta de pruebas.
El hombre también llevó a la mujer al Tribunal de Reclamos Administrativos Civiles y de Familia de Abu Dhabi solicitando una compensación por los daños que la mujer le causó debido a acusaciones falsas.
El hombre árabe declaró que es un miembro respetable de la comunidad y en su trabajo. Sostuvo que las afirmaciones sin fundamento en su contra dañaron su reputación.
Después de escuchar a todas las partes, el tribunal desestimó la demanda y enfatizó que no había evidencia que demostrara que su reputación se dañó.
El juez también señaló que la mujer había hecho uso de sus derechos legales.