viernes. 29.03.2024

Kuwait ha denunciado como una "transgresión" las declaraciones de un alto funcionario filipino que exigió "sangre por sangre" en el caso de una compatriota recientemente asesinada en Kuwait, lo que provocó tensiones entre los dos países.

A principios de esta semana, el secretario de Asuntos Exteriores de Filipinas, Teddy Locsin Jr, dijo que rechaza cualquier oferta de dinero de sangre en el caso de Jeanelyn Villavende, quien Manila señaló que fue brutalmente asesinada en Kuwait. “HABRÁ SANGRE @DFAPHL para Jeanelyn Villavende. Renuncio y rechazo cualquier oferta de dinero de sangre por su tortura / asesinato. Quiero dos vidas por la vida que se llevaron”, dijo Locsin en su cuenta oficial de Twitter. Agregó que un abogado que maneja el caso no está autorizado para "sugerir o aceptar dinero de sangre de sus asesinos".

Por su parte el diario Al Rai publicó, citando a una fuente oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores de Kuwait que ese país "expresa consternación y denuncia a esa declaración que incluye una transgresión de los poderes de las autoridades de seguridad y judiciales en el país".

La fuente agregó que las declaraciones del funcionario filipino contradicen las "reglas más simples de las relaciones internacionales" y buscan influir en las investigaciones en curso sobre el caso.

Kuwait ha arrestado a empleadores de Villavende después de su sospechosa muerte el mes pasado.

El empleador kuwaití de la trabajadora filipina asesinada había ofrecido 713 millones de dirhams en dinero de sangre si su familia desistía de presentar cargos penales contra él y su esposa, informó a los periodistas el padre de Jeanelyn, Abelardo Villavende.

Anteriormente, una autopsia oficial de Filipinas descubrió que la empleada doméstica había sufrido abusos sexuales antes de ser asesinada.

En respuesta, Filipinas impuso la prohibición del despliegue de trabajadores nacionales en Kuwait.

Ya en 2018, los lazos entre Kuwait y Filipinas se deterioraron después de que se encontró el cuerpo de una empleada de hogar filipina dentro del congelador de su empleador. La disputa se resolvió poco después de que los dos países llegaron a un acuerdo que regula el empleo de trabajadoras domésticas.

Indignación en Kuwait tras la demanda filipina de "sangre por sangre"
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