jueves. 28.03.2024

Un pakistaní, que se "enamoró" de una niña de 13 años obligada a prostituirse en Dubai, está siendo juzgado por cargos de abuso sexual. El joven de 25 años admitió haber tenido relaciones sexuales con la menor varias veces "con su consentimiento", además informó de la situación de la niña a la policía, lo que llevó a su rescate. 

El Tribunal de Primera Instancia de Dubai juzga también a otro pakistaní, de 49 años que trajo a la niña de 13 años al país, después de decir que era su padre, y la obligó a prostituirse.

Supuestamente violó a la menor y la asaltó con un palo cada vez que ella se negaba a tener relaciones sexuales con él.

El acusado dirigía un burdel en Abu Hail en Dubai y fue arrestado junto con dos mujeres cómplices, que enfrentan cargos de prostitución, de tráfico de personas, de administración de burdeles, de abuso sexual y de facilitar el sexo pagado con las otras dos mujeres. 

El caso fue denunciado en septiembre de 2018. Según los registros judiciales, la niña declaró a los fiscales que el acusado la obligó a prostituirse en su casa hace dos años. Luego emitió una visa de visita para ella y la trajo a Emiratos alegando que era su hija. La niña se vio obligada a mantener relaciones sexuales con "once hombres de diferentes nacionalidades" todos los días por dinero.

 "También me violó en mi país y en Emiratos Árabes Unidos. Me pegaba con un palo cada vez que me negaba a tener relaciones sexuales con él", manifestó la niña a los fiscales. 

El otro acusado, de 25 años, era cliente del burdel, se enamoró de la niña y prometió casarse con ella. Informó de la situación de la niña a la policía después de que recibió un mensaje de texto del hermano de la menor, que reside en Pakistán, solicitando ayuda. 

La policía allanó el lugar y detuvo a las dos mujeres, ambas de 23 años, que admitieron trabajar como prostitutas. También corroboraron las denuncias de violación de la niña. Dijeron que el dueño del burdel se acercó a la niña mientras estaba borracho y quiso tener sexo con ella. Él la asaltó cuando ella se negó. Ambas mujeres admitieron que el acusado pagó 200.000 rupias paquistaníes (5.200 dirhams) a sus familias por traerlas a Emiratos Árabes Unidos.

El acusado de 49 años negó los cargos de violación pero admitió haber consumido alcohol. También admitió que trajo a la menor al país para la prostitución y facilitó el sexo remunerado a las otras dos jóvenes. 

Informes forenses mostraron moretones en el cuerpo de la niña. 

Un pakistaní ayuda a una niña obligada a prostituirse en Dubai
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