La Policía de Dubai devolvió 1.200.000 dirhams a una empresa pocas horas después de que una banda de asiáticos robara la cantidad. Los mafiosos dijeron a los empleados de la empresa que eran policías, cerraron la puerta rápidamente, se apoderaron del dinero, los teléfonos, las computadoras portátiles y huyeron del lugar.
El general de división Tariq Mohammed Tahlak, director de la comisaría de policía de Naif, manifestó que la comisaría recibió un informe de la sala de operaciones en el que se alertaba del robo de 1.200.000 dirhams. Las patrullas cercanas al lugar se dirigieron al sitio en tiempo récord.
Tahlak explicó que los empleados describieron a los perpetradores, se revisaron las cámaras de vigilancia del edificio y se analizaron los datos criminales con extrema precisión y profesionalismo, por lo que la policía arrestó a los delincuentes rápidamente. Los trabajadores de la empresa señalaron que seis personas tocaron el timbre, y una de ellas hablaba el dialecto emiratí, asegurando que eran policías, por lo que abrieron la puerta y descubrieron que eran asiáticos, quienes robaron el dinero y los disposirvos y huyeron del lugar.
El equipo de investigación criminal revisó las cámaras de la zona y continuó la búsqueda hasta localizar a los sospechosos. El primer sospechoso fue arrestado en su residencia, el segundo fue detenido en el área de Al Satwa. El equipo allanó la residencia del tercer sospechoso en el área de Al Bidda y los otros dos también fueron localizados.
El teniente coronel Yasser Al Hashemi, jefe del Departamento de Antecedentes Penales, declaró que la rápida respuesta y el estudiado plan de trabajo impidieron que los sospechosos abandonaran la zona. También dijo que los perpetradores eran asiáticos que estaban desempleados, y que el dinero del robo total se encontró en su poder. Tras el interrogatorio, los sospechosos confesaron su delito y fueron remitidos a la Fiscalía por cargos de robo bajo coacción.
