Septiembre de 2022, se recordará por diferentes tipos de despedidas, definitivas a líderes mundiales, artistas, escritores y otro adiós, que a pesar de parecer un hasta pronto, para los aficionados al tenis y seguidores del gran Roger Federer, se toma como si fuera irreversible. Hoy hablaremos de la relación del astro suizo con Colombia.
Federer se retira a los 41 años, joven para los mortales, pero anciano en el mundo del deporte de alta competición, ha tenido una longeva y exitosa carrera desde que se hizo profesional en 1998. Su Majestad, como se le conoce al suizo, fue número uno del mundo durante 310 semanas, ganador de 20 títulos de Grand Slam. El término Grand Slam, designa a los cuatro torneos anuales más importantes del mundo, que se llevan a cabo en Australia, Francia (Roland Garros), Reino Unido (Wimbledon) y Estados Unidos.
Pero Federer no sólo son números, es un estilo único, la elegancia fuera y dentro de la cancha. Un caballero, que nunca discutió las decisiones de los jueces, además de ser un hombre de familia. Casado con la extenista Mirka Vavrinec, con quien tiene cuatro hijos (2 parejas de gemelos, 2 niñas y 2 niños), siempre era entrañable ver en el palco de su equipo, donde suelen estar los técnicos y asesores, a los niños y la madre que sufría por su esposo. Me alegra por Mirka que ya no va a sufrir más.
Roger Federer ha sido objeto de innumerables reconocimientos, pero uno de los más significativos, haber sido elegido en 2011 como el segundo ser humano más confiable y respetado del mundo, por detrás de Nelson Mandela. Precisamente Roger Federer patrocina una fundación, enfocada en promover el acceso a la educación y al deporte de niños desfavorecidos. De igual forma, Federer ha sido embajador de buena voluntad de UNICEF, participando en multitud de eventos en favor de la infancia.
Federer ha estado dos veces en Bogotá, en 2012 y 2019, para juegos de exhibición. En la primera visita dijo entusiasmado, que jamás había sentido un público tan ruidoso. En la segunda, hubo lágrimas, porque el partido tuvo que ser cancelado, por un toque de queda, derivado de una situación de orden público en la capital colombiana. Visiblemente emocionado Federer manifestó su felicidad por estar en el país y se disculpó por la cancelación, aunque él no era el responsable de la situación.
En cualquier caso, a Federer le queda muy bien el sombrero vueltiao, uno de los símbolos colombianos por excelencia. Sólo espero que haya una tercera oportunidad en el futuro de tener al icono suizo, como un partido de beneficencia o una visita de buena voluntad, o de turismo con su bonita familia.
Durante su larga carrera deportiva se ha enfrentado con varios tenistas colombianos. Nuestro país, no sólo se ha destacado en el fútbol o el ciclismo. Gracias a Colsanitas, una compañía aseguradora y proveedora de servicios de salud, hemos tenido tenistas de renombre como Santiago Giraldo, Fabiola Zuluaga, Mauricio Hadad, Mariana Duque, Pablo González, Catalina Castaño, entre otros. Los más veteranos recordamos a Álvaro Betancur, Jairo Velasco e Iván Molina. En la actualidad María Camila Osorio y Daniel Galán defienden con dignidad los colores colombianos.
Aparte de los mencionados, algunos se destacaron jugando contra el gran Roger Federer, pero especialmente Alejandro Falla quien lo enfrentó al menos 8 veces y aunque nunca lo venció, tuvo dos partidos memorables, la final del torneo de Halle de 2014 (que recuerdo haber visto en televisión), quedando subcampeón tras Federer y en Wimbledon, el Grand Slam favorito de Federer, en donde el colombiano estuvo a punto de hacer historia en 2010, pues ganó los dos primeros sets y estuvo a punto de haber vencido al campeón reinante, fue un partido memorable e intenso. Alejandro puede tener la satisfacción personal de haber jugado sin complejos con quien era el mejor del mundo en ese momento.
Ahora bien, hubo colombianos que doblegaron al gran Federer, la pareja de dobles Juan Sebastián Cabal y Robert Farah, quienes han sido número uno del mundo en su especialidad y ganado dos Grand Slam, Wimbledon y el abierto de Estados Unidos, vencieron a la dupla de Federer y Nicolás Mahut en 2014. Pero hubo otro tenista que puede ufanarse de haber triunfado en sencillos contra el suizo. Manuel Liévano de Bucaramanga, cuando era tenista juvenil lo derrotó en un partido en Ámsterdam en 1995, aunque el colombiano no recuerda el marcador, queda para la anécdota.
Una de mis aspiraciones era ver jugar a Federer en vivo y ver marcar las horas y los minutos del reloj suizo. El sueño casi lo cumplo en 2018, cuando se jugó la Copa Laver en Chicago, ciudad en la cual presto servicios en el consulado de Colombia, había comprado los boletos para ese fin de semana y por temas de mi trabajo diplomático, tuve que viajar a otro Estado, afortunadamente alcancé a verlo en la presentación del torneo en el Millenium Park, a una distancia relativamente corta, pero me queda la frustración de nunca haberlo visto jugar en vivo. Mi esposa Patricia, sí puede decir que disfrutó de su elegante juego.
En cualquier caso, desde este rincón de palabras, le deseamos lo mejor a Roger Federer, larga vida y prosperidad, parodiando una serie de televisión, agradeciéndole tantos momentos gratos al frente del televisor. Su Majestad Federer, es de esos monarcas, a quien sí merece hacerle una respetuosa venia.
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Dixon Moya es diplomático colombiano de carrera, escritor por vocación, lleva un blog en el periódico colombiano El Espectador con sus apellidos literarios, en el cual escribe de todo un poco: http://blogs.elespectador.com/lineas-de-arena/ En Twitter en horas no laborales trina como @dixonmedellin