Los organizadores de la Copa del Mundo de Qatar han presentado campamentos en el desierto para los seguidores del fútbol de todo el mundo.
Un portal en vivo este lunes mostró que la reserva estaba disponible para cabañas prefabricadas en 'pueblos deaficionados' especiales en tres ubicaciones.
El coste de una cabaña para dos personas comienza en 207 dólares, con dos camas individuales o una doble en oferta. Cuentan con baño, nevera, Wi-Fi y servicio de limpieza, con restaurantes y comida para llevar disponibles en el pueblo.
Los campos, en Zafaran, Ras Bu Fontas y Rawdat Al Jahhaniya, están fuera de la ciudad.
"Las aldeas de aficionados están ubicadas en las afueras de Doha, pero aún se puede acceder a ellas mediante transporte público o viajes compartidos, lo que te permite acceder fácilmente a todas las atracciones culturales populares, así como a los estadios y actividades de la Copa Mundial de la FIFA", informó la Agencia de Alojamiento de Qatar.
Los campamentos han sido anunciados como una alternativa de bajo coste a los hoteles y alojamientos de Airbnb, que han sido absorbidos rápidamente por los principales patrocinadores, locutores y miles de funcionarios extranjeros.
El precio total de una estadía para dos personas durante todo el torneo podría ascender a 5.598 dólares, muestra el portal, aunque se espera que pocos fanáticos que viajan se queden más de unos pocos días.
Zafaran es el más alejado del Aeropuerto Internacional de Doha hacia el extremo norte, fuera de la ciudad de Lusail , donde el Gobierno de Qatar construyó un complejo desde cero para la Copa del Mundo. Ras Bu Fontas está al sur de la ciudad, detrás del aeropuerto y cerca de la costa del Golfo. Tiene una parada en la principal línea de metro de Doha. por último, Rawdat Al Jahhaniya está al oeste de Doha hacia el desierto. Se encuentra a 20 minutos en coche desde la Corniche, pero cerca de una hora en un autobús público.
El mes pasado, el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, recordó que Abu Dhabi y Dubai están entre las ciudades del Golfo que recibirían un impulso turístico, ya que los aficionados pueden pernoctar en Emiratos Árabes Unidos y viajar a Doha para los partidos.
