viernes. 29.03.2024

La embajadora de Emiratos Árabes Unidos ante la ONU, Lana Nusseibeh, emitió el martes un llamado a la calma entre israelíes y palestinos durante el Ramadán, con el fin de que no se repitan los enfrentamientos mortales que empañaron el mes sagrado el año pasado.

Nusseibeh realizó un llamamiento a la paz entre los dos grupos, luego de una serie de apuñalamientos palestinos en Jerusalén Este y Cisjordania ocupada en las últimas semanas, que a menudo se encontraron con respuestas letales por parte de las fuerzas israelíes.

Durante el Ramadán del año pasado, los enfrentamientos en Jerusalén Este y Cisjordania desencadenaron en parte una guerra de 11 días en Gaza entre Israel y militantes palestinos. El mes sagrado de este año coincide con la festividad judía de la Pascua. “Esperamos que este próximo período sea de calma, en contraste con los eventos traumáticos que ocurrieron en el territorio palestino ocupado el año pasado”, señaló Nusseibeh al Consejo de Seguridad de la ONU.

“Estas ocasiones representan una oportunidad para promover los valores de la convivencia pacífica entre las diferentes religiones”. Agregó que los palestinos deben tener la "libertad" para practicar su religión en la Mezquita Al Aqsa de Jerusalén, que fue un punto álgido de la violencia del año pasado, donde resultaron heridos cientos de palestinos y una veintena de policías.

Sus comentarios se hicieron eco de los de otros miembros del consejo, incluida la enviada de Estados Unidos, Linda Thomas-Greenfield, quien advirtió sobre "sensibilidades religiosas".

El enviado de paz de la ONU, Tor Wennesland, advirtió de las "provocaciones" de los líderes de los grupos rivales.

Los diplomáticos se reunieron en Nueva York horas después de que las tropas israelíes mataran a dos palestinos en tiroteos separados en la Cisjordania ocupada.

También el martes, un asaltante árabe-israelí mató al menos a cuatro personas en la ciudad sureña de Beersheba antes de que un transeúnte le disparara fatalmente en uno de los ataques más mortíferos en Israel en años, manifestaron la policía local y los servicios de emergencia. Hady Amr, el subsecretario de Estado adjunto de EEU, estuvo en la región para ayudar a reducir la tensión latente.

El ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Yair Lapid, se reunió con el rey Abdullah II de Jordania la semana pasada en un esfuerzo por mantener la calma durante las festividades religiosas.

Por su parte, el primer ministro israelí, Naftali Bennett, descartó conversaciones formales de paz con los palestinos durante su mandato, pero dice que busca mejores oportunidades económicas en Cisjordania. Los funcionarios israelíes esperan aliviar la tensión antes del mes sagrado.

Los palestinos buscan un estado independiente en Cisjordania, Jerusalén Este y Gaza, todo territorio capturado por Israel en 1967. Israel continúa construyendo asentamientos en tierra palestina, que la ONU y la mayoría de los países aseguran que es ilegal.

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