Grecia no encontró nada sospechoso en un avión de Emirates que volaba este jueves de Dubai a Nueva York con escala en Atenas y se vio obligado a regresar al Aeropuerto Internacional heleno después de una alerta de seguridad de Estados Unidos, informó la policía el jueves.
Las autoridades griegas fueron alertadas por las autoridades estadounidenses sobre un pasajero "sospechoso" y justo después de las 2000 GMT, el avión, escoltado por dos aeronaves de combate, aterrizó de regreso en el aeropuerto Eleftherios Venizelos en Atenas para controles de seguridad, dijeron fuentes policiales a la agencia de noticias Reuters.
El vuelo EK209, que ya había despegado, recibió la orden de que realizara un regreso de emergencia cuando estaba sobrevolando Italia.
El avión cambió de rumbo y se dirigió únicamente sobre el mar, evitando sobrevolar tierra como se observa en la captura de pantalla del vuelo de Fligthradar24, escoltado por dos cazas F-16 y un portaaviones, que despegaron de la base estadounidense de Suda en la isla griega de Creta.
Asimismo, en el vuelo de Atenas a Dubai, programado para salir la ciudad europea a las 17:55 GMT, los pasajeros abordaron el avión y las puertas se cerraron. La aeronave rodó hasta la pista. Sin embargo, antes de que se completara el proceso, el capitán informó que tenía que dar marcha atrás. La excusa dada fue “un problema técnico”.
Cuando la aeronave llegó nuevamente al área de estacionamiento, se solicitó a los pasajeros que desembarcaran y se llevaran todas sus pertenencias, sin embargo tras ser sometidos a controles exhaustivos no se encontró nada sospechoso.
La aerolínea Emirates confirmó ambos incidentes en Atenas, Grecia, el 10 de noviembre. El portavoz de Emirates citó "controles de seguridad solicitados por las autoridades" como la razón detrás de los vuelos EK209 y EK210.
