Un total de 92 niños murieron y 241 resultaron heridos en Yemen entre principios de enero y el 15 de noviembre a pesar de una relativa calma en las hostilidades bajo una tregua negociada por la ONU el 2 de abril, según la organización benéfica internacional Save the Children. Un niño murió o resultó herido todos los días de este año en Yemen, aseguró la organización e instó a las facciones armadas en el país devastado por la guerra a proteger a los niños y abstenerse de atacar lugares y reuniones civiles.
Los niños de la ciudad sitiada de Taiz señalaron a la organización que los bombardeos y combates arbitrarios les han impedido ir a la escuela o al hospital, o incluso salir de sus hogares. Instaron a los grupos de derechos humanos a presionar a las facciones en conflicto para proteger a los menores del maltrato y la violencia, proteger las escuelas y los hospitales y presionar para que se extienda la tregua, que expiró en octubre sin un acuerdo.
“Nunca puede haber una justificación para matar o abusar de los niños y el mundo debe actuar ahora para detener la impunidad de estos crímenes”, declaró Rama Hansraj, directora de país de Save the Children para Yemen. “El futuro de Yemen depende de sus niños, y su seguridad y bienestar son los verdaderos indicadores de paz".
Una organización de derechos yemení relató que los hutíes respaldados por Irán son responsables de la muerte de miles de niños yemeníes durante la guerra al obligarlos a luchar en el conflicto, bombardear sus hogares, escuelas y otras instituciones civiles y colocar miles de minas terrestres en todo el país.
The Network for Rights and Freedom explicó que además de los 6.728 niños que murieron en el frente y que fueron reclutados formalmente por los hutíes, la milicia fue responsable de la muerte de otros 3.597 niños entre enero de 2015 y julio de este año. De esos 3.597, 519 fueron asesinados por francotiradores hutíes, 748 por bombardeos y 514 murieron como resultado de los asedios de los hutíes a sus ciudades y pueblos. Otros 647 jóvenes perdieron la vida a causa de las minas terrestres. Las minas terrestres hutíes, los francotiradores y los bombardeos de zonas residenciales hirieron a 6.317 niños durante el mismo período, incluidos 516 que sufrieron discapacidades permanentes o amputaciones. De todas las ciudades yemeníes, el mayor número de muertes y lesiones infantiles se produjo en Taiz, seguida por el oeste de Hodeidah, Marib, Aden y Lahj.
Mientras tanto, el lunes por la mañana estallaron combates entre las tropas gubernamentales y los hutíes en varias zonas disputadas fuera de Taiz, según funcionarios militares locales y residentes. Los residentes dijeron que los hutíes bombardearon el domingo por la noche áreas residenciales cerca de un antiguo aeródromo al oeste de Taiz, hiriendo a un niño y provocando grandes explosiones.
