El Gobierno libio reconocido por la comunidad internacional ha acusado este lunes al Ejército Nacional Libio (ENL), la milicia dirigida por el señor de la guerra Khalifa Haftar, de los recientes bombardeos en la capital, Trípoli, y en el sur del país en los que han muerto civiles, la mayoría mujeres y niños.
El Gobierno no ha concretado una cifra de víctimas mortales, pero milicias afines al mismo han apuntado a al menos 14 muertos en la que supone una nueva escalada en los ataques aéreos del ENL, embarcado desde abril en una ofensiva para intentar conquistar Trípoli que se encuentra estancada desde hace meses.
Los bombardeos ocurrieron el domingo en Al Sauani, en el suroeste de Trípoli, y la semana pasada en Umm al Aranib, a unos 765 kilómetros al sur de la capital.
Servicios de emergencia han confirmado tres menores muertos y un cuarto herido en Al Sauiani. Mientras, en Umm al Aranib, los vecinos han protestado este lunes contra estos ataques quemando neumáticos en las calles y cerrando colegios.
La Misión de Naciones Unidas en Libia ha expresado su "gran preocupación por la intensificación de los bombardeos sobre zonas civiles" y ha advertido de que estos ataques "indiscriminados" contra civiles suponen una grave violación del Derecho Internacional Humanitario.
