Está prevista la asistencia de cerca de 250.000 personas, incluyendo monarcas, presidentes y primeros ministros de más de cien países.
Entre los dignatarios destacados se encuentran el presidente argentino Javier Milei y el estadounidense Donald Trump.
Desde anoche, cientos de fieles han aguardado pacientemente en las inmediaciones del Vaticano para ser de los primeros en ocupar la plaza.
A las 6 de la mañana (4:00 GMT), comenzó el acceso controlado a la basílica vaticana por la Avenida de la Conciliación, permitiendo a los fieles tomar posiciones en las primeras filas dispuestas para el público.
El funeral comenzará a las 10 de la mañana (8:00 GMT) y marcará un momento histórico, ya que Francisco será el primer papa desde 1903 en no ser enterrado en la basílica de San Pedro; su lugar de descanso final será la basílica de Santa María la Mayor, un sitio muy apreciado por el pontífice debido a su devoción por la Virgen María.
La ciudad de Roma ha reforzado su seguridad ante la llegada de 164 delegaciones y unos 50 líderes mundiales, con bloqueos en varias calles del centro y un despliegue policial sin precedentes para garantizar la seguridad del evento.
