La aerolínea Alitalia ha cancelado este viernes el 15% de sus vuelos de corto y medio radio por la huelga de pilotos y asistentes de vuelo convocada por el sindicato Anpac (Asociación Nacional Profesional de Aviación Civil), según informan RTVE y el portal Arabian Business.
El paro no afectará a las operaciones de largo radio hacia Norteamérica, Sudamérica y Extremo Oriente ni tendrá consecuencias en los vuelos domésticos de las instalaciones aeroportuarias de Bolonia y Venecia.
La compañía italiana consideró "pretenciosas" las razones para la huelga dadas por Anpac tras los acuerdos recientes alcanzados con seis organizaciones sindicales.
El pasado 21 de julio, la aerolínea alcanzó un acuerdo con los sindicatos para mejorar las condiciones de los trabajadores y la compañía ha señalado que el despido de 1.000 trabajadores el próximo año es "fruto de la fantasía y carece de todo fundamento".
Anpac considera que la huelga se justifica por la falta de respuestas concretas a los trabajadores de Cityliner, filial de Alitalia, y a la negativa de la aerolínea a poner por escrito que se compromete a mantener los niveles de empleo al final del vigente plan de contratos de "solidaridad". El sindicato convocó el paro de 24 horas para presionar a la gestión de la empresa y que ofrezca garantías sobre la dotación de personal y los niveles de sueldo después de la compra de Alitalia por la aerolínea del Golfo Etihad Airways con una participación del 49 por ciento en el año pasado.
El plan de contratos se aplica a empresas en crisis y tiene como objetivo mantener puestos de trabajo durante un período máximo de 24 meses, según la ley vigente en Italia, mediante reducciones de sueldo y de duración de jornada laboral.
La aerolínea considera que la huelga es "irrespetuosa con los sacrificios de los pasajeros en los dos últimos meses, los compañeros de Alitalia y los trabajadores del transporte aéreo nacional".
La empresa aérea hace también referencia al esfuerzo en el aeropuerto de Fiumicino por recuperar la total normalidad en sus operaciones, tras el incendio del 7 de mayo. El pasado 18 de julio, se reabrió la terminal quemada.
