jueves. 28.03.2024

Sin derecho a voto

"¿Acaso no existen medios telemáticos y consulares para gestionar el voto de otra manera?"
Urna

Concluyó el plazo para votar en las embajadas y consulados. Incluso, el de la prórroga. 

Tras un arduo y complejo proceso de solicitud para ejercer nuestro derecho en las elecciones del 20D, muchos de los expatriados no hemos recibido la documentación. Por cierto, no sabía yo que los derechos se solicitan por fax en el plazo establecido.

Me siento indignada, frustrada, iracunda y rabiosa. Ya sé que vivo en una dictadura, pero pensaba que mi país, España, era una democracia donde sus ciudadanos, tanto residentes como no residentes, gozamos de una serie de derechos, como por ejemplo, derecho a voto, a elegir libremente a nuestros gobiernos. 

Y no, no me conformo con poder escribir y publicar libremente estas líneas sin que nadie me censure. Y no, no me conformo pensando que vivo rodeada de países donde sus habitantes carecen de derechos de los que yo sí disfruto (recuerdo que Arabia Saudí empieza a unos cien kilómetros de aquí). 

Solicitar el voto por parte de los expatriados ha consistido en una carrera de obstáculos primero y en una lotería después. En la lotería de recibir o no la documentación a tiempo. Y si esto es así, ¿Por qué se lleva a cabo el proceso? ¿Por qué se creó esta ley y se envían las cartas tarde? ¿Quién lo decide y ejecuta? ¿A quién le beneficia?

Sumamos a la complejidad del proceso el sistema de correos del Qatar, que he explicado con más detalle en mi blog, Arquitectura y Emoción. Pero esto no me sirve como excusa para justificar el sistema de voto rogado o que tantos de nosotros nos hayamos quedado sin papeleta.

No me parece justo. Muchos de los expatriados no podemos votar y no es por casualidad, por un descuido. Para mí esto es intencionado. Y repito que hay beneficiados de que tantos no residentes desistan en el proceso de solicitud o de que muchos otros no reciban la carta a tiempo. 

¿O acaso no existen medios telemáticos y consulares para gestionar el voto de otra manera?

Alivió mi frustración y mi rabia un encuentro fortuito ayer en correos. Conocí a varios españoles que me ayudaron a lidiar con la burocracia postal, que hicieron que no me sintiera sola y con los que pude compartir mi estado emocional. Gracias, chicos. Pili, mi nueva amiga de Utiel, me llamó incluso por la tarde, para decirme que habían vuelto a correos y que en esas horas transcurridas no había novedad. No había llegado mi carta ni las suyas. Me conmovió que se crearan esos vínculos. Probablemente votemos (bueno, si hubiéramos votado) a partidos distintos, pero nos estábamos ayudando a tener la posibilidad de ir a las urnas. Porque eso es la democracia y porque España no puede seguir así. 

Necesitamos leyes donde no se discrimine a ningún ciudadano y políticos que no compliquen más la vida de los españoles. Porque están ahí para organizar el país. Que somos muchos y necesitamos un orden. Señores, que ustedes son los líderes de este grupo de personas, de este territorio. Es su trabajo. Que no se nos olvide.

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