La firma de un acuerdo de libre comercio con Emiratos Árabes Unidos estaría entre los planes inmediatos del Gobierno británico, donde se aceleran los cambios después de que el país votase el pasado 24 de junio en referéndum abandonar la Unión de Europea y el primer ministro, David Cameron, anunciase su dimisión.
Cameron abandonará Downing Street el próximo miércoles tras someterse a las preguntas de los parlamentarios y entrevistarse con la reina. Comenzará entonces el mandato de Theresa May, de 59 años, que se convertirá en la segunda mujer que asume el cargo de primer ministro en la historia de Gran Betraña, después de Margaret Tacher.
May asume el relevo de Cameron después de que la secretaria de Energía y candidata del Brexit, Andrea Leadsom, haya arrojado la toalla en la carrera por liderar el Partido Conservador.
Aunque May ha asegurado que "Brexit significa Brexit" ha aclarado que no quiere formalizar el proceso de salida de la UE antes de final de año, con el fin de atar bien la negociación.
Según publica la agencia WAM, empezar a negociar los acuerdos de libre comercio con los países de fuera de la UE, entre ellos EAU, estaría entre los planes inmediatos del nuevo gabinete liderado por May.
Así lo ha asegurado David Davis, un asesor cercano a May que se perfila como uno de los futuros miembros de su gabinete, en un artículo publicado en la página web Conservative Home, que recoge la agencia de noticias WAM.
Según Davis, la clave para garantizar el éxito británico fuera de la UE está en la rápida negociación de acuerdos de libre comercio con los principales socios comerciales internacionales de Gran Bretaña. La economía británica, dijo, tiene que avanzar hacia "una estrategia de crecimiento impulsado por las exportaciones".
Lejos de ser una opción arriesgada, ha dicho, "el Brexit nos da muchas herramientas para hacer frente a los retos económicos muy graves a los que el país se enfrentará en las próximas décadas".
Debido a que los tratados de la UE se obtienen mediante la búsqueda de un compromiso de 28 naciones, "la UE es torpe en la negociación de acuerdos de libre comercio, es por ello que en la actualidad sólo tenemos acuerdos comerciales con dos de nuestro top ten de socios comerciales fuera de la UE", dice Davis.
"Esto es muy importante para nosotros, ya que alrededor del 60 por ciento de nuestro comercio se mueve fuera de la UE. De hecho, vendemos tanto a los países no comunitarios con los que no tenemos acuerdos comerciales como lo hacemos a la UE", sostiene Davis asegurando que un primer objetivo para el nuevo Gobierno debería ser entablar negociaciones con rapidez para preparar acuerdos de libre comercio que entraran en vigor tan pronto como Gran Bretaña deje formalmente la Unión Europea.
Según Davis, hay precedentes que avalan el éxito de esta estrategia y cita casos como el de Estados Unidos, Australia, China o India, afirmando que "los países individuales, con la capacidad de ser flexible, pueden negociar acuerdos comerciales mucho más rápidamente que los grandes bloques comerciales".
Según Davis, el nuevo primer ministro debe, de forma inmediata, "desencadenar una gran ronda mundial de negociaciones con todos nuestros principales socios comerciales" que permita cerrar acuerdos en el plazo de 12 a 24 meses.
"Podemos negociar una zona de libre comercio de forma masiva más grande que la de la UE. Los tratados de comercio con EE.UU. y China, por sí solos, nos darán una zona comercial casi dos veces el tamaño de la UE y por supuesto también buscaremos acuerdos con Hong Kong, Canadá, Australia, India, Japón, los EAU, Indonesia y muchos otros".
Cualquiera de estos acuerdos, aclara, "sólo entraría en vigor en el momento en que Gran Bretaña saliera de la UE" pero ya estarían totalmente negociados cuando el Brexit se normalice.
Según Davis, este movimiento permitiría multiplicar la inversión extranjera procedente de empresas "deseosas de aprovechar estas ofertas" en los próximos dos años.
