Las fuerzas de seguridad fronterizas pakistaníes están en alerta máxima tras conocerse que cientos de militantes de grupos como ISIS, Al Qaeda y talibanes, todos ellos de Pakistán, han salido de las cárceles afganas después de que Kabul cayera en manos de los insurgentes.
Muchos de los presos estaban internados en la base aérea de Bagram y han sido liberados por los talibanes. Entre ellos se encuentra un antiguo responsable del movimiento talibán pakistaní, Maulvi Faqir Muhammad, también conocido por sus estrechos vínculos con el líder de A Qaeda, Ayman al-Zawahiri.
Las autoridades afganas habían detenido en varios cientos a combatientes de los talibanes paquistaníes que se unieron a ISIS."Ahora están prófugos", dijo un funcionario de la inteligencia paquistaní a la agencia de noticias alemana DPA.
Las autoridades paquistaníes han asegurado que habían discutido la situación con los talibanes afganos.
"Nuestras fuerzas armadas están en alerta", dijo a los periodistas el ministro del Interior de Pakistán, Sheikh Rashid Ahmed, cuando informaba sobre la situación en la frontera entre Pakistán y Afganistán.
