El misil balístico disparado por los rebeldes yemeníes que atacaron la capital saudita la semana pasada era de Irán y llevaba marcas iraníes, dijo este viernes el principal funcionario de la fuerza aérea de Estados Unidos en Medio Oriente. La confirmación se dio durante una conferencia de prensa en Dubai.
El teniente general Jeffrey Harrigian, que supervisa el Comando Central de las Fuerzas Aéreas en Qatar aseguró que las autoridades estaban investigando cómo el misil fue contrabandeado a Yemen a pesar de que una coalición encabezada por Arabia Saudita controla el espacio aéreo, los puertos y las fronteras del país. El alto mando militar no dio precisiones sobre el tipo de proyectil que era.
La coalición militar encabezada por Arabia Saudita había acusado el domingo a Irán de ser el responsable del lanzamiento del proyectil, que terminó siendo interceptado sobre Riad. Al día siguiente, cerró todas las fronteras aéreas, marítimas y terrestres con Yemen, que está hundido en una guerra civil.
Inicialmente, los rebeldes hutíes, contra los que Arabia Saudita pelea en ese conflicto, se habían adjudicado el ataque. Pero Riad y parte de la comunidad internacional señalan desde hace tiempo a Teherán como principal benefactor de estas milicias chiitas.
El misil disparado el 4 de noviembre fue interceptado cerca del Aeropuerto Internacional de Riad por las defensas aéreas sauditas. Fragmentos del proyectil aterrizaron en un área deshabitada al norte de la capital. La autoridad de aviación civil de Arabia Saudita señalóque el misil no causó ningún daño al Aeropuerto Internacional King Khalid y que los vuelos no se vieron afectados.
"La dirección de las fuerzas de coalición considera esto como una agresión militar flagrante por parte del régimen iraní, que podría equivaler a un acto de guerra", indicó el lunes una declaración difundida por la agencia oficial saudí SPA. El comunicado resaltó "el derecho del reino saudí a responder a Irán en el momento apropiado y de la manera apropiada".
Por su parte, el régimen iraní había respondido rechazando las "irresponsables y provocativas" acusaciones de Riad. El portavoz del ministerio de Exteriores, Bahram Ghassemi, agregó que los dichos del reino petrolero eran "injustos y destructivos".
El presidente francés Emmanuel Macron describió el misil disparado hacia Riad como "obviamente" iraní durante una visita a Abu Dhabi esta semana.
Nikki Haley, embajadora de Estados Unidos en las Naciones Unidas, dijo el martes que otro lanzamiento en el mes de julio sobre Arabia Saudita involucró un misil Qiam-1 iraní, una variante de corto alcance con combustible líquido del misil Scud. Irán usó un Qiam-1 en combate por primera vez en junio cuando atacó a los militantes del Daesh en Siria en respuesta a los ataques de militantes de ese grupo terrorista en Teherán.
Arabia Saudita interviene militarmente al mando de una Coalición de países árabes desde el 2015 en Yemen, uno de los países árabes más pobres, para ayudar al Gobierno del presidente Abd Rabo Mansur Hadi frente a los rebeldes hutíes que controlan vastas regiones del país.
