El Tribunal de Apelación de Dubai confirmó un fallo emitido por el Tribunal Penal que condenaba a una banda de ocho asiáticos a seis meses de cárcel, seguidos de la deportación y una multa de 207.000 dirhams después de que fueran condenadas por robar cables eléctricos por un valor equivalente al de la multa de una nave en el Polígono Industrial Al Quoz.
Según un informe anterior, se habían robado cables por valor de 207.000 dirhams de un almacén de una empresa inmobiliaria con sede en la zona industrial de Al Quoz. Los perpetradores irrumpieron en la sala eléctrica y accedieron al almacén.
Un policía declaró que durante las investigaciones, un equipo de detectives reunió pruebas hasta que pudieron llegar a los autores del delito y detuvieron a tres de ellos. Los detenidos confesaron el cargo que se les imputaba y llevaron a los investigadores hasta el resto de los miembros de la banda, que fueron detenidos en otro emirato.
En el interrogatorio, los condenados dijeron que acudieron de noche a un almacén que pertenecía a una empresa inmobiliaria en el Polígono Industrial Al Quoz. Luego fueron a la sala eléctrica y pudieron romper la cerradura de la puerta, usando tijeras de hierro, una palanca y un martillo y entrar a la sala de mantenimiento. Allí abrieron las tapas de las cajas de los interruptores eléctricos, se apoderaron de los cables y huyeron.
Agregaron que uno de ellos fue el autor intelectual del robo.
