El Tribunal Penal de Dubai ha condenado a cuatro chinos a tres años de cárcel por secuestrar y torturar a una mujer en el emirato.
La mujer, también de nacionalidad china, fue secuestrada el 3 de agosto del año pasado. Concertó una cita en Jebel Ali con uno de los acusados para comprarle moneda digital. Cuando la mujer llegó en coche para encontrarse con el vendedor, este estaba acompañado por otros tres.
Uno de ellos le mostró una tarjeta de identificación que se parecía a la de la policía china y dijo que la buscaban en su país de origen por cargos de corrupción. La sacaron a la fuerza del asiento del conductor y la subieron a la parte trasera del vehículo, donde la ataron y le cubrieron el rostro.
Más tarde, la llevaron a un lugar en Dubai Investment Park donde la golpearon, desnudaron y torturaron con una pistola Taser (paralizante).
Los chinos la obligaron a desbloquear su teléfono móvil para tener acceso a su billetera de moneda digital. Transfirieron 8.000 unidades de moneda digital, por un valor de más de 30.000 dirhams (8.160 dólares), así como 8.000 dirhams en efectivo de su cartera y su bolso Louis Vuitton, que tiene un valor de 7.500 dirhams. Tomaron fotos de la mujer y amenazaron con publicarlas en línea si los denunciaba a la policía.
Se marcharon y dejaron a la víctima en el vehículo, pero ella logró quitarse lo que le cubría la cara y vio la matrícula de su coche. Llamó a la policía y denunció el robo. “Conocí a uno de los hombres en la aplicación Telegram un mes antes del incidente. Luego se puso en contacto conmigo ofreciéndome vender algo de moneda digital, y de hecho le compré algo de dinero digital”, declaró la mujer al tribunal.
La contactó nuevamente, pidiéndole entonces comprar moneda. “Nos conocimos en persona el día del incidente, apareció con tres hombres más y me secuestraron”, agregó.
No se reveló cómo la policía rastreó y detuvo a los hombres, de entre 26 y 37 años. En el tribunal, negaron los cargos de secuestro, tortura y robo.
Los cuatro fueron declarados culpables y serán deportados tras cumplir sus sentencias de prisión.
