Tres personas asiáticas fueron condenadas a tres meses de prisión, seguidos de la deportación, por entregar documentos de identidad falsos para intentar entrar en un complejo residencial en Dubai.
El caso se remonta al pasado mes de agosto, cuando el guardia de seguridad del complejo se encontró con el segundo imputado que pidió entrar en la zona y mostró una identificación.
El guardia le pidió al acusado que se quitara la mascarilla para confirmar su identidad, luego notó que la foto de identificación era de otra persona.
El acusado argumentó y afirmó que era su foto pero el guardia decidió llamar a la policía, y fue entonces cuando el acusado admitió que la identificación pertenecía a uno de sus amigos.
Minutos después, otro guardia de seguridad se presentó con el primer acusado e informó a su compañero que sospechaba que la identificación del acusado era falsa.
Los guardias sabían que los dos acusados llegaron en camiones por lo que denunciaron el incidente a la policía, que llegó y los arrestó a ambos.
Durante las investigaciones, ambos admitieron haber contado con la ayuda del tercer imputado, que les entregó identificaciones falsas para que las utilizaran para conseguir entrar en el complejo.
El tercer acusado está ahora prófugo y ha sido condenado junto con sus cómplices a tres meses de cárcel.
