La Coalición Árabe liderada por Riad acusa a Irán de haber atacado instalaciones petroleras en Arabia Saudita, declaró el portavoz de la alianza militar, el coronel Turki al Maliki.
En la madrugada del 14 de septiembre, una serie de ataques con drones provocó incendios en dos refinerías de la compañía Saudi Aramco en los distritos de Abqaiq y Khurais, en el este de Arabia Saudita.
"La investigación inicial indica que las armas utilizadas en el atentado terrorista contra las instalaciones en Abqaiq y Khurais, son iraníes y las afirmaciones de los hutíes no tienen fundamento", dijo al Maliki, en declaraciones recogidas por la cadena de televisión Al Arabiya.
La declaración se produjo horas después de que Irán afirmara que había confiscado otro barco y su tripulación cerca del Estrecho de Ormuz.
También destacó que la coalición es capaz de contrarrestar los ataques contra las instalaciones petroleras del reino. "Tenemos la capacidad de contrarrestar los ataques", indicó el coronel.
El Ministerio de Exteriores iraní ya calificó de "mentira" tales acusaciones.
Los rebeldes hutíes reivindicaron la autoría de los ataques y advirtieron que seguirán atacando el territorio de Arabia Saudita hasta que el Reino cese las operaciones bélicas en Yemen.
Al Malki señaló que las autoridades revelarían la ubicación desde la cual se lanzaron los drones en una reunión informativa futura.
Mientras, el secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo acusó a Irán de estar detrás de los ataques en Abqaiq y Khurais y otro centenar de ataques más contra Arabia Saudita.
Irán rechazó en términos contundentes la acusación, al subrayar que EEUU busca destruir su reputación y allanar el camino para futuras sanciones.
La compañía Saudi Aramco reconoció que el incidente del 14 de septiembre redujo su producción diaria en unos 5,7 millones de barriles, casi a la mitad.
