Un depósito de aceite y neumáticos en el puerto de Beirut ha quedado envuelto en llamas este jueves, pero no hay noticias de heridos por el momento.
Los hechos se producen poco después de que una explosión devastara el lugar y las zonas residenciales que lo rodeaban, causando 190 muertos.
El Ejército del Líbano dijo que no estaba claro por el momento por qué el aceite y los neumáticos comenzaron a arder y afirmó que está enviando helicópteros para ayudar a mantener el fuego bajo control.
Las imágenes de televisión muestran un helicóptero lanzando agua en la zona de la explosión. También a los bomberos, intentando terminar con las llamas en una zona rodeada por los escombros que dejó la explosión de hace un mes.
El director de la Cruz Roja del Líbano, George Kattaneh, dijo que no se temía que se produjera otra explosión como resultado de este incendio, afirmando que no había heridos, a pesar de que algunas personas están padeciendo problemas respiratorios.
