El Tribunal Penal de Dubai condenó a un africano a diez años de cárcel seguidos de la deportación y le impuso una multa de 100.000 dirhams tras ser declarado culpable de importar y poseer marihuana. El acusado trajo estupefacientes por paquete postal desde Estados Unidos, pero afirmó que uno de sus amigos se lo envió sin su conocimiento.
El caso se remonta a octubre del año pasado cuando un inspector de una empresa de correos sospechó de un paquete que contenía alimentos y artículos para niños.
Según el testimonio del inspector, en el interior de las cajas de comida de los niños encontró ocultas sustancias sospechosas, por lo que puso el caso en conocimiento de las autoridades competentes.
De acuerdo con los documentos oficiales, el material sospechoso fue examinado y el informe del laboratorio forense arrojó que se trataba de marihuana, y el dueño del paquete fue detenido.
En el interrogatorio, el sospechoso negó cualquier relación con los estupefacientes, alegando que uno de sus amigos le había enviado el paquete con algunos alimentos y juguetes para niños con fines comerciales, pero no sabía nada de las drogas que contenía.
El tribunal concluyó que el acusado sabía sobre los estupefacientes incautados y que su negación en los interrogatorios tenía como objetivo eludir las acusaciones y el castigo.
