Una joven de 27 años con visa de turista fue sentenciada a seis meses de cárcel luego de que el Tribunal de Primera Instancia de Dubai la declarara culpable de trabajar en la prostitución. También será deportada después de finalizar el tiempo de prisión.
El incidente fue reportado el 18 de junio en la comisaría de policía de Bur Dubai después de que la joven rusa alegara que fue forzada a tener sexo con un hombre. Ella permanece detenida desde entonces.
Un sargento de policía declaró que estaba en servicio de patrulla cuando la sala de operaciones lo alertó sobre un incidente. "La joven estaba borracha cuando la arrestamos. Dijo que tuvo relaciones sexuales con un hombre turco, a quien acababa de conocer en un club nocturno. Afirmó que luego se vio obligada a tener relaciones sexuales con su amigo, también turco. Más tarde, se retractó confesando que las relaciones fueron consentidas en ambos casos".
Los dos hombres fueron remitidos al Tribunal de Delitos Menores por los cargos de tener relaciones sexuales ilícitas con la acusada.
Los dos turcos, junto con un tercer hombre, también fueron acusados de consumir alcohol sin licencia.
Durante la investigación de la fiscalía, declaró que había llegado a EAU el 14 de mayo con una visa de turista.
El día del incidente, a la 1 de la madrugada, estaba en un club nocturno donde bebió cuatro vasos de una bebida alcohólica. Afirmó que no conocía a los dos hombres, antes del incidente. Recordó que estaba sentada con uno de ellos en una mesa, donde también estaban presentes sus otros amigos. Más tarde, la invitó a su apartamento para continuar la fiesta. Y después de media hora, llegaron sus dos amigos.
La rusa admitió haber tenido relaciones sexuales con los dos y confesó que había estado trabajando en la prostitución desde su llegada a Dubai.
También confesó que obtenía entre 1.000 y 3.000 dirhams, y en menos de un mes ya había enviado 8.000 dirhams a su familia en su país.
El informe forense mostró que el hombre que invitó a la mujer a su apartamento tiene una enfermedad de transmisión sexual. La acusada puede apelar el veredicto.
