Un árabe, que trabajaba como gerente en una empresa privada en Dubai, fue declarado culpable de acosar sexualmente a dos de sus empleadas. Fue condenado a seis meses de prisión y se le ordenó pagar una multa de 10.000 dirhams.
La primera víctima, una empleada divorciada, declaró que el acusado la atrajo a una habitación vacía, con el pretexto de que la necesitaba para un asunto urgente. Luego la acosó sexualmente, según revelaron los registros judiciales.
La mujer intentó gritar y amenazó con informar a su superior y a la policía, pero el acusado la insultó y la intimidó con despedirla si denunciaba el incidente.
La segunda mujer afirmó que luego de la muerte de su esposo, el acusado comenzó a llamarla repetidamente para asuntos innecesarios que no tenían nada que ver con el trabajo. Él mencionaría su "soledad" y eventualmente comenzó a enviar mensajes inapropiados.
Tras las investigaciones, el Tribunal de Primera Instancia condenó al director y le impuso una multa de 10.000 dirhams. La apelación fue rechazada y será deportado tras cumplir su condena en la cárcel.
